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Anfetaminas indignantes
Con la tragedia de Venezuela ya no se sabe que es más indignante, si la agresión de Maduro o la inoperancia de la OEA.
Sábado, 24 de Junio de 2017

La crisis de Venezuela no pudo terminar en una situación peor a lo que hoy día ve el mundo en imágenes de televisión: jóvenes que son asesinados todos los días por el gobierno de Maduro. 

Ya van 75 muertos en cerca de tres meses de protestas, los cuales en su mayoría son jóvenes que hasta ahora empezaban a vivir. 

Esta semana el mundo vio las imágenes del adolescente asesinado, Fabián Urbina de 17 años, y otra espantosa, la de David Vallenilla de 22 años cuando recibía un tiro que le destrozó el corazón. 

Todo por protestar en contra de un gobierno inmoral. La oposición de Venezuela ya le ha dado una lección al mundo, a todos los países que comienzan a ver como algo común esta tragedia, incluida la triste y pusilánime OEA que no ha sido capaz de lograr enfrentar la tragedia del hermano país. 

Ha sido lamentable la inoperancia y la ineficacia del organismo internacional.

La oposición le ha dado una lección de dignidad al mundo. 

Es admirable lo que han hecho Leopoldo López, Enrique Capriles, Maria Corina Machado y todos esos jóvenes que valientemente se enfrentan día a día a un régimen corrupto y opresor. 

Frente a estas muertes de tantos jóvenes  la respuesta de Maduro no podía ser otra que la del dictador cínico e inmoral: “la oposición le da anfetaminas a los estudiantes para que agredan a la guardia nacional”. Esa es una respuesta cínica e inmoral. 

Es otra forma de agredir a la población venezolana que ya no sabe que otra cosa puede hacer frente a la tragedia que vive. 

Con la tragedia de Venezuela ya no se sabe que es más indignante, si la agresión de Maduro o la inoperancia de la OEA. Es posible que la segunda sea más grave.

¿Qué le queda a la oposición venezolana frente a una comunidad internacional que no reacciona, que se limita cada día a ver otro joven asesinado y a la ineficacia de unos burócratas internacionales que no tienen ninguna sensibilidad frente a lo que sucede? 

Me recuerda una de las frases de Milán Kundera en uno de sus libros: “este mundo moralmente pervertido en el que todo está cínicamente permitido”. 

Es una buena frase para lo que está sucediendo en el hermano país. Cuántos más jóvenes deben morir asesinados antes de que el mundo reaccione?       

Será que ante la ineficiencia de la OEA y todos los organismos internacionales del mundo, incluida Unasur que la preside otro inmoral como Ernesto Samper, la única posibilidad que le queda a esa valiente oposición Venezuela es que por ejemplo, el presidente de los Estados Unidos Donald Tump, en otra de sus inesperadas respuestas internacionales se le ocurra hacer algo contra Maduro?  

Como van las cosas, hasta deseable que lo haga con tal de acabar con ese dictador cínico e inmoral que tenemos al lado, así sea dándole anfetaminas de verdad.

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