Las áreas metropolitanas existen en nuestro sistema jurídico desde hace algo más de 30 años como una forma de unión de municipios aledaños para el manejo de sus intereses. La de aquí empezó a funcionar en 1991.
Lo que se buscaba es que varios municipios próximos que en el papel deben enfrentarse a problemas similares, los pudiesen resolver de manera conjunta.
Los problemas que enfrenta Cúcuta por ser capital desde luego que son muchos más complejos que los de Los Patios, el Zulia, San Cayetano, Villa del Rosario y Puerto Santander vive su propia realidad.
Los problemas que enfrentan las ciudades de nuestra región e incluso en Colombia en muchos temas son similares: el 78% de los habitantes del país viven en las ciudades, en una tendencia que es progresiva y eso ya es preocupante.
Está demostrado como en algunos municipios del Norte de Santander la población ha decrecido - San Calixto y Teorama-porque los jóvenes no se quedan en sus pueblos, no encuentran oportunidades. Salen a edad temprana y nunca regresan. Varios de nuestros municipios se están envejeciendo.
Los municipios deben planificar sus metas para afrontar de mejor manera los problemas que enfrentan. Eso se llama planes de ordenamiento territorial que es un instrumento de planeación.
Como estamos acostumbrados a hacer las cosas mal y más si se trata de planeación, según el Departamento Nacional de Planeación el 90% de esos planes están mal hechos en todo el país, están desactualizados.
El 96% no contienen nada sobre temas ambientales y por eso suceden tragedias como las de Mocoa.
Aún más, no sé qué tantos proyectos conjuntos haya podido adelantar el Área Metropolitana de Cúcuta en 35 años. Tengo la impresión que se esperaba mucho más. Por la cercanía del municipio de los Patios a Cúcuta, algunas de las medidas que toma esta última sí afectan de manera directa y más si se trata de temas de movilidad.
Sin duda que es un exceso del alcalde de Los Patios amenazar salirse del área metropolitana por la restricción vehicular, pero creo que tiene razón en su reclamo.
El alcalde de Cúcuta ha actuado de manera apresurada, como si él área metropolitana no existiere, casi inamistosa, y por ello urge que revise su medida.
