Los 550 beneficiarios del programa Mi Negocio, que impulsa la Alcaldía, empezaron ayer a hacer las compras que necesitan para emprender su experiencia como empresarios.
Ellos participaron en la Feria del Proveedor, que aprovecharon para hacer las cotizaciones de los insumos que cada uno necesita para despegar su negocio.
Por ejemplo, Marisela Torres, 38 años, madre cabeza de hogar, cotizó un enfriador y víveres para la tienda que funcionará en su casa del barrio El Salado.
La Secretaría del Banco del Progreso del municipio, en asocio con Prosperidad Social de la Presidencia de la República, los capacitó en contabilidad y costos.
La Alcaldía les da a cada uno de los 550 beneficiarios 2 millones de pesos para la compra de los insumos en cada línea de negocio.
Lady Bermúdez, directora del Banco del Progreso, dijo que con la iniciativa genera oportunidades de empleo e incentiva el emprendimiento de empresas. “Le estamos apostando al pequeño productor”, dijo.