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Tania Agudelo, la titiritera de los más desfavorecidos de Cúcuta

La mujer de 45 años hace de este arte un conductor terapéutico que ayuda a las personas.

Tania Agudelo Sedano es una artista comprometida con niños y mujeres víctimas de la violencia. Tiene 45 años, y casi toda su vida ha trabajado para ayudar a los demás.

La vocación de servicio la heredó de su madre, Mariana Gilma Sedano, porque fue ella quien generó en sus hijos la vena artística y la labor por las comunidades.

A los 7 años, se enamoró de los títeres y el teatro; desde entonces entiende el significado del compromiso.

Sus grandes maestros fueron sus hermanos Aníbal y Jaime, quienes le compartieron lo que sabían.

Aguedelo es soñadora y una guerrera inapagable. Es la hija menor de 15 hermanos.

A los 15 años, se vinculó con un grupo de jóvenes que hacia teatro para llevarlo a las comunidades más pobres.

Tiene claro que el arte es una herramienta pedagógica. Por eso cumplió 30 años como titiritera. Detrás del teatrino  aprendió que el compromiso requiere sacrificios.

Y de sacrificios sí sabe esta mujer, porque cuando más estuvo comprometida con su labor social, tuvo que dejarlo todo.

Cuando trae a la memoria esa época, sus ojos se apagan y es como si la tristeza de aquel momento volviera  a ella; prefiere decir que por circunstancias de la vida tuvo que dejar todo en ese momento.

Pero ella nunca se da por vencida. Cuando regresó, se vinculó nuevamente a lo que más ama hacer, el teatro de títeres.

Es madre soltera, y le ha inculcado a su hijo Rubén el amor por el arte y el compromiso de trabajar con comunidades. Los títeres la llevaron a la carrera de sicología.

Lo más difícil de la labor que realiza es el maltrato que ha recibido por parte de la fuerza pública, que en varias ocasiones la ha estigmatizado por ser artista.

“La Policía cree que porque una es artista, de una vez tiene cara de subversiva”, explica. “Algunas veces me tiran el material de trabajo”, agregó.

Le duele la indiferencia de la gente, por lo que desde su labor busca hacerles un poco más agradable la vida a quienes la rodean. Es una defensora de los derechos humanos y se caracteriza por denunciar y hacer valer la voz de los pobres.

Afirma que vive en la frontera más movida, donde pasa de todo, y que los gobiernos solo han servido para vender lo poco de la región y perpetuar la violencia creando grupos que afectan la dinámica social y política. 

Por eso, insiste en que lo mínimo que ella puede hacer es entregar parte de su compromiso como ser humano, para ayudar al desarrollo de la ciudad.

Es así como hace de los títeres una herramienta estratégica para trasladar las emociones, convirtiéndola en ese conductor terapéutico que ayuda a las personas.

Para Agudelo, el arte es una herramienta valiosa, porque la gente puede sacar y decir cosas que no ha podido expresar.

(Tania Agudelo tiene su Taller de Títeres de cColombia en el barrio Colsag donde enseña a niños y jóvenes a desenvolverse detrás de un teatrino.)

Su trabajo con los niños

Cuando habla del trabajo con los niños, es inevitable que sus ojos irradien luz, la felicidad se apodera de ella y dice con una gran sonrisa que seguirá trabajando por ellos.

Traer los niños a la casa cultural Taller de Títeres de Colombia es todo desafío para ella, porque muchas veces no se tienen los recursos necesarios.

Pero eso no la desmotiva: muchas veces va hasta las comunidades a compartir la alegría y la magia de los títeres.

Para Agudelo, es muy importante mostrarles a todos estos niños víctimas de violencia, abuso y abandono, que hay un mundo diferente afuera.

“Es que si yo les muestro a esos niños que hay una realidad muy diferente a la que ellos viven, puedo hacer que el rumbo de su vida cambie, que el arte los salve”, dijo.

Ama viajar y mientras lo hace va cumpliendo sus sueños artísticos. Aseguró que seguirá trabajando en el posconflicto, recorriendo con su arte la región para reconstruir el tejido social.

Recalca las palabras de Ernesto Che Guevara: “la solidaridad es la ternura de los pueblo”, y dice que no se puede dejar de ser solidarios y entregar un poco de nosotros a aquellos que más lo necesitan.

Angélica Gutiérrez | Practicante de periodismo

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Viernes, 24 de Marzo de 2017
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