En el último trimestre de 2016, la cartera hipotecaria de Norte de Santander aumentó gracias a los estímulos que otorga el Gobierno a través del programa de Vivienda de Interés Prioritario para Ahorradores (VIPA).
Así lo confirma Juan Francisco Yáñez, vicepresidente de Camacol Cúcuta y Nororiente, quien espera que la dinámica se mantenga con el plan de vivienda presidencial.
Según cifras del Dane, en el tercer trimestre de 2016, el saldo de la cartera hipotecaria fue $869.311 millones, aumentando un 10,38%. En 2015, la cartera se ubicó en $811.972 millones
El número de créditos otorgados en la región también creció. Según cifras del organismo oficial, se aprobaron 18.940, es decir, 1.264 créditos más que en 2015 cuando se otorgaron 17.676 créditos.
Sin embargo, los altos índices de inflación y la volatilidad con respecto al dólar han afectado los costos, pero no son un obstáculo, porque la construcción mantiene un comportamiento positivo, dice Yáñez.
Andrés Peñaloza, funcionario de crédito hipotecario, indicó que hay un incremento en la aprobación de créditos para VIPA, porque en 2015 se empezaron a construir estos proyectos y en el tercer trimestre de 2016 se están entregando.
Según Peñaloza, en Norte de Santander se han aprobado créditos para cuatro mil unidades del programa VIPA.
Otro de los segmentos que ha impulsado el crecimiento de la cartera crediticia es el programa de Vivienda de Interés Social (VIS), que concentra el 80% de la vivienda a nivel nacional, precisó Peñaloza.
Se prevé que en el próximo trimestre continúe creciendo la cartera hipotecaria, debido al aumento registrado en los programas de Vivienda de Interés Social.
Según el Dane a nivel nacional -en el tercer trimestre de 2016- el monto crediticio aprobado para viviendas fue de $49,8 billones, mientras que en el mismo periodo de 2015 fue de $44,9 billones, lo que significó una variación de 11%.
En materia de número de créditos, durante el tercer trimestre la cifra aumentó 3,9%, ya que se pasó de otorgar 997.621 créditos a 1.036.833.
Al hacer el cálculo respecto al tipo de vivienda, se encuentra que el mayor impulso lo generó la vivienda No VIS que creció 5,4%, mientras que la de interés social tuvo un alza de 2,7%.
Esta cifra evidencia un comportamiento estable de los destinos residenciales con respecto al año inmediatamente anterior y la importancia de mantener las políticas impulsadas por el Gobierno Nacional como los subsidios a la tasa de interés y los programas de vivienda social para que la dinámica del mercado continúe con volúmenes de inversión saludables.
