“Hijo de Cacique nace cantando”. Efectivamente así sucedió y Martín Elías Díaz era en la actualidad una de las figuras con mayor proyección dentro de la música vallenata, al punto que logró congregar masas en torno a su actuación, tal como lo hizo su padre Diomedes Díaz.

Su carrera artística empezó siendo muy niño, pues a escasos6 años, mostró la casta haciendo magistrales interpretaciones al lado de una agrupación familiar, hasta cuando consideró que podía independizarse.

En sus inicios lo acompañó Rolando Ochoa en el acordeón, fueron sus primeros cuatro álbumes, los dos siguientes al lado de Juancho De la Espriella y luego regresó con quien consideró una fórmula perfecta, Rolando, el hijo de otro grande como lo es Calixto Ochoa.

Martín Elías venía siguiendo más de cerca los pasos de su padre el ‘Cacique de la Junta’ Diomedes Díaz, su voz solía en ocasiones recordarlo, lo mismo que el sentimiento que le imprimía a cada interpretación, por eso es inevitable la comparación.

En algún momento su padre llegó a decir que sus hijos cantantes debían forjar su propio estilo y eso han hecho, pero la herencia es inevitable. 

Martín Elías indicó en una oportunidad que puede ser en parte innovador como lo fue Diomedes, con un canto rápido sin dejar de lado la raíz vallenata, y recordó lo que éste hizo a principio de los 80 al lado de Nicolás ‘Colacho’ Mendoza, cuando salió de los esquemas y gustó.

El trabajo no fue fácil para este joven cantante, tenía un referente fuerte, alguien que hizo historia, entonces demostrar que lo suyo era talento, se tornaba en una tarea diaria, pues no bastaba con ser el hijo de un grande, debía crecer artísticamente por sus medios y lo ha logrado.

Martín Elías soñaba con una carrera larga, sin pretensiones, pero con el deseo de alcanzar muchas metas, de vivir en los escenarios y contar siempre con esta creciente ola de seguidores que esperan con ansias cada uno de sus trabajos.

Una de sus metas la estaba cumpliendo, vivir de su arte, eso fue lo que decidió al culminar la secundaria, sabía que tenía madera y que el vallenato estaba allí para ser interpretado. Era el más comercial de los hijos de Diomedes Díaz y eso se debía a la constancia.

Pero su corta vida, tan solo 26 años, se truncó este Viernes Santo. La mañana de este viernes 14 de abril, un accidente con el vehículo en el que se movilizaba por vías de Sucre, luego de un concierto la noche anterior, terminó con la existencia de Martín Elías Díaz.