Los delincuentes abordaron a la víctima arrebatándole su bolso con el dinero, dejando a la comunidad conmocionada y alarmada por la audacia de los criminales.
El sargento Mijail Kulikov fue declarado culpable.
Un tribunal ucraniano condenó a 10 años de prisión a un sargento ruso miembro de la tripulación de un tanque por disparar contra un edificio residencial, según informaron el lunes los servicios de seguridad ucranianos (SBU).
El sargento Mijail Kulikov, que fue hecho prisionero al inicio de la invasión rusa de Ucrania el 24 de febrero, fue declarado culpable de "violar las leyes y costumbres de la guerra" por un tribunal de Chernígov, en el norte de Ucrania.
Según el SBU, se estableció que el militar ruso "cruzó la frontera con Ucrania desde Bielorrusia el 24 de febrero" y luego, al avanzar hacia esta capital regional muy afectada por los combates, "bombardeó localidades".
"El 26 de febrero, bajo la orden de su comandante, disparó entre otros contra un edificio residencial de 11 pisos con civiles. Varios departamentos fueron destruidos", señaló el SBU, según el cual el tanque fue interceptado poco después y Kulikov capturado.
En mayo, la justicia ucraniana había condenado a cadena perpetua a un suboficial ruso de 21 años, Vadim Shishimarin, por el asesinato de un civil, sentencia que se redujo en apelación a 15 años de prisión. Fue el primer militar ruso en ser juzgado por crimen de guerra desde el inicio de la invasión.
Además, dos soldados acusados de haber bombardeado el primer día de la guerra dos pueblos en la región de Járkov, en el este de Ucrania, fueron condenados a 11 años de cárcel. Otros casos están siendo juzgados.
