Hace 28 años David y Rufina están juntos y viven su amor por las calles de Ocaña. Se conocieron en la plaza de mercado y desde entonces han hecho reír con sus alocadas historias.
David Reyes Vega, de 68 años, y Rufina Ramírez, de 65; son naturales de El Carmen. La pareja permaneció, por años, en situación de mendicidad.
David se caracteriza por su lucidez y Rufina por su vocación servicial. A los dos se les veía limpiando bancas con un trapo.
Con el tiempo consiguieron posada en la casa de un compadre de David y allí vivieron un tiempo. El hombre consiguió trabajo cargando maíz y embolando zapatos, hasta que no pudo volver a conseguir empleo y decidieron irse a la calle.
Para la comunidad ocañera los personajes son el símbolo del amor sin límites y en el marco de la celebración del Día del Adulto Mayor en Ocaña -el pasado fin de semana- la pareja fue presentada con un nuevo aspecto.
Con el apoyo del programa del adulto mayor que lidera la Alcaldía, la pareja está cambiando de vida y Rufina, fue una de las candidatas al reinado de la tercera edad.
De acuerdo con Mario Castellanos, director del programa del adulto mayor, los ocañeros se han vinculado a la campaña y les han obsequiado comida, ropa y productos de aseo personal.
“Nosotros estamos limpios y nunca le hemos quitado nada a nadie, por eso nos quieren mucho”, dijo David.
Desafortunadamente, el hombre hace varias semanas sufrió un accidente. Un carro lo arrolló en el barrio La Gloria y quedó afectado de la columna. Ahora camina con dificultad y junto a Rufina, son los nuevos inquilinos del ancianato en Ocaña.
“La calle se ha vuelto peligrosa y hay ladrones. Estaba ahorrando un dinero para comprar comida y cuando me quedé dormido me robaron”, aseguró David.
Actualmente tienen dos semanas de estar viviendo en el Asilo Nuestra Señora de la Torcoroma y aunque David dice que quisiera tener dinero para irse con Rufina a una habitación cerca del parque principal, no niega el buen trato y el cambio de vida.
Las hermanas que atienden el ancianato confeccionaron el traje con el que Rufina participó en el Reinado del Adulto Mayor. Y aunque la corona fue para la candidata del barrio Los Almendros, ella disfrutó desfilando por la pasarela.
Los abuelos que habitan en el asilo le hicieron barra y para Rufina, más allá del cetro y la corona el premio es ver a su amado David recuperándose.