La discusión que se presentó el pasado 6 de mayo antes de dar inicio a la convención del Centro Democrático, en Cúcuta, le pasó factura al excongresista Basilio Villamizar, uno de los involucrados.
La veeduría nacional del partido decidió amonestarlo por agredir física y verbalmente a un militante de la colectividad, toda vez que este tipo de actuaciones está prohibida en los estatutos del uribismo.
Según quedó consignado en el documento que le fue enviado a Villamizar, el día del encuentro nacional, que fue seguido en simultánea en la capital del departamento, el exrepresentante y un grupo de acompañantes intentaron entrar a la fuerza al Club Comercio a algunos invitados, sin la debida acreditación.
“Presentaron cartas en fotocopia, sin la respectiva firma de la directora del partido y sin credenciales”, relató la veedora, Mery Becerra Gómez, quien agregó que Villamizar, además, agredió de manera verbal a los organizadores del encuentro y le lanzó un puñetazo a uno de los asistentes.
Con esta actuación, el también director del Centro de Pensamiento Primero Colombia en Norte de Santander, habría transgredido las normas que rigen al Centro Democrático, pues según la veedora, es deber de los miembros del partido, “respetar el honor y la imagen del partido, sus instituciones y miembros”.
Becerra también le recordó a Basilio que agredir a los integrantes de la colectividad “o causar daño injustificado a los bienes o demás militancia del partido”, se constituye en una falta gravísima.
Por esa razón, le comunicó que: “En cumplimiento de las normas transcritas, esta veeduría le impone una amonestación, con copia a su hoja de vida, la que tendremos muy en cuenta para futuras oportunidades”.
El excongresista aseguró que hasta el momento no ha sido notificado de ninguna decisión por parte del uribismo y que le extraña, por cuanto cree que primero debió ser llamado a descargos.
Contó que para la convención, la dirección nacional expidió unas credenciales no solo para los delegados, sino para unos invitados especiales, “pero cuando llegamos, los amigos del directorio no estaban dejando entrar, diciendo que las cartas eran apócrifas y falsas y que no podíamos entrar”.
Reconoció que los ánimos se caldearon y que decidió intervenir, pero dijo que los organizadores intentaron agredirlo y esto generó la reacción de sus acompañantes, quienes intentaron defenderlo.
“Hubo un amague de irnos a las manos, pero finalmente todo se calmó”, aseguró.
Villamizar dijo que se comunicó ayer mismo con el expresidente Álvaro Uribe, para informarle de su situación y pedirle garantías, toda vez que uno de los planes del dirigente es meterse en una de las listas del Centro Democrático al Congreso y una amonestación de este tipo le podría complicar sus aspiraciones.
