El escándalo de corrupción de Odebrecht sigue profundizando las diferencias entre el presidente Juan Manuel Santos y el expresidente y senador Álvaro Uribe Vélez.

En esta oportunidad fue el jefe de Estado el que lanzó fuertes indirectas contra su principal opositor, por cuenta de las revelaciones que se han conocido en los últimos días y la captura de uno de sus funcionarios estrella, el exviceministro de Transporte, Gabriel García Morales, quien se declaró culpable por la celebración indebida de contratos.

Durante la posesión del nuevo procurador general de la Nación, Fernando Carrillo Flórez, Santos dijo que en estos seis años y medio que lleva de gobierno, ningún familiar suyo ha hecho un solo negocio con el Estado o se ha visto envuelto en algún tráfico de influencias.

“Ninguno de mis hijos o hermanos, ni mi señora ni mis cuñados, ninguno ha tenido el más mínimo cuestionamiento. Y qué bueno poder decir también que, hasta ahora, y espero que así sea hasta el final de mi segundo mandato, ninguno de mis altos funcionarios ha sido condenado o seriamente acusado de algún acto de corrupción”, aseguró.

El presidente dijo que espera no tener jamás a ninguno de sus más cercanos colaboradores en la cárcel por corruptos. Esto en clara alusión a Uribe, quien se ha visto enredado en varias polémicas, toda vez que un buen número de sus ministros, asesores y funcionarios de confianza están presos o son objeto de investigación.

Santos también se refirió al caso del hacker que envolvió la pasada campaña presidencial y por el cual fue absuelto recientemente el dirigente del Centro Democrático, Oscar Iván Zuluaga.

“Es hora, señor fiscal, de aclarar de una vez por todas el sartal de acusaciones, mentiras y especulaciones que se han difundido últimamente, en una aplicación del viejo refrán ‘los pájaros disparándole, en este caso con mentiras, a las escopetas’, algo que se ha vuelto constante en el proceder de la oposición”, manifestó.

En los últimos días, el cruce de acusaciones, señalamientos y críticas se ha intensificado entre la oposición y el gobierno de Juan Manuel Santos, por este último caso y los escándalos de corrupción del país.