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El stand up, en el ojo de los comediantes

Desde esta noche regresan algunos de estos humoristas a traves del canal Comedy Central.

En el escenario estos comediantes se transforman: hacen catarsis, exorcizan sus demonios, ironizan sobre los temas que copan la palestra mundial y hasta se burlan descaradamente de sus penas e infortunios, todo a través de un monólogo y dirigiéndose de frente al público.

Y los más famosos del stand up en Colombia -o lo que en español significa comedia de pie- tendrán cada sábado (desde hoy), a las 10:00 de la noche, la misión hacer reír a toda latinoamérica a través del canal Comedy Central.

En la lista se destacan Adrián Parada, Tato Devia, Sergio Leguizamón, Gonzalo Valderrama, Pamela Ospina, Rafael López, Catalina Guzmán, William Aguirre y Liss Pereira. A este  Stand Up Comedy se unen Jonathan Gato, Ricardo Quevedo, Antonio Sanint, Alejandro Riaño, Freddy Beltrán, Iván Marín, Diego Camargo, Paula Arcila y Diego Mateus.

En total son 12 episodios de 30 minutos, grabados el pasado mes de marzo en el Royal Center en Bogotá.

Todos abordarán temas de actualidad de una forma humorística, única e irreverente, como lo ha venido haciendo Comedy Central desde 2010 en otros países como México, Chile, Venezuela, Argentina y Brasil.

Tato Devia, conocido por su estruendosa voz y por ser capaz de crear imágenes divertidas, exageradas y ridículas dentro de su show, subraya que esta segunda temporada es una buena oportunidad para mostrar el talento que germina y se consolida en el país a través de este tipo de comedia.

Como por ejemplo el de Sergio Leguizamón, quien se siente como una estrella de fútbol con la oportunidad de participar en este formato televisivo: “Me siento como un equipo de la B que subió a jugar no con los de la liga A, sino con los equipos de la  Champions League, como el Atlético de Bucaramanga jugando contra el Barsa”.

En este contexto, La Opinión les presenta las visiones que tienen cinco de estos comediantes sobre lo que es el ‘stand up’ en Colombia.

Alejandro Riaño

“En Colombia todavía tenemos visiones muy tradicionales de hacer comedia. Lastimosamente aún nos reímos de los prejuicios, somos un poco racistas, homofóbicos y machistas, pero el rol de la comedia es transformar y eso es lo que estamos tratando de lograr. Antes éramos  diez tratando de hacer reír, hoy somos 40 o 50, así que podemos decir que entre más comediantes haya es mucho mejor para el país, porque la comedia es el arte que te aleja de la violencia”.

Iván Marín

“Me atrevo a decir que Colombia es potencia en ‘stand up’ o comedia en vivo. Es un país que tiene los mejores exponentes de Latinoamérica, quienes llevan calidad al escenario. Y aunque cada comediante maneje su estilo propio, el común denominador es que somos muy rápidos con la risa, muy metralletas, nosotros tenemos una desesperada necesidad de que el público ría, ría y ría aunque para el sexo somos distintos, para eso sí nos tomamos tiempo (risas)”.

Rafael López

“La gracia del ‘stand comedy’ es que es un humor que tiene que ver con la vida, con lo que hacemos con la familia, los amigos y compañeros; nuestras anécdotas en el bus, en la calle, en el trabajo. Por eso me gusta investigar sobre el cerebro y la risa. He aprendido que a medida que crecemos y envejecemos nuestro cerebro se va volviendo más exigente para reír; contrario a cuando somos niños, que nos reímos de todo. Así que doy fe que mientras más aprendemos sobre la risa, es más difícil que a los comediantes nos hagan reír”.

Adrián Parada

“Nosotros no creamos personajes para llevarlos al escenario, pienso que el comediante es la misma persona, pero potenciada 100 veces, con la neurosis y todos los defectos que uno tiene. La comedia es reírnos de lo que nos causa dolor y frustración; por ejemplo de las contradicciones de la vida, del ridículo que hacemos, de los improperios que gritamos cuando nos enfurecemos. La risa nos transforma, porque provoca que uno libere la tensión y seamos más buena gente”.

Sergio Leguizamón

“Con mi mamá nos reímos mucho de la pobreza en la que estamos sumidos por decidir ser comediante. Yo era ingeniero químico y no sé en qué momento desvié el camino y ahora me incliné por la comedia. Esto es como una droga, uno no puede salir de esto. Es un trabajo difícil, al principio era muy malo, pero con el tiempo he mejorado (risas). Hasta he descubierto que el humor sirve para conseguir mujeres, porque ellas aman a un tipo que sea jocoso. Uno no puede tener plata, pero si las hace reír algo puede pasar ¿no?”.

Alicia Pepe | alicia.pepe@laopinion.com.co

Viernes, 29 de Abril de 2016
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