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'Dietusa', la forma más triste de adelgazar

La víctima de la ‘lipotusa’ pierde el apetito y no tiene intenciones de recuperarlo.  

Su amigo se tornó de repente ermitaño, frugal, inapetente, y adelgazó tanto que la ropa le queda gigante. Así es el ‘lipoentusado’, un muerto en vida que se autocastiga por haber sido dejado y que se somete voluntariamente a una especie de huelga de hambre prolongada. 

La víctima de la ‘lipotusa’ en lugar de comer litros de helado y malteadas, pierde el apetito y no tiene intenciones de recuperarlo.  

Como dice aquella vieja balada del mexicano Óscar Eduardo Athié, vive “flaco, ojeroso, cansado y sin ilusiones”, y su acelerada reducción de medidas lo hace parecer un protagonista de ‘The Walking  Dead’,  y no precisamente Lauren Cohan ni Andrew Lincoln, sino un zombie.   

“Está comprobado médicamente que a nivel físico, el deprimido, llámase en este caso ‘entusado’, disminuye de peso, duerme menos, se siente cansado a diario, su concentración  en el trabajo decrece y padece lentitud motora. La serotonina baja y solo está pensando en cosas negativas acerca de sí mismo, del mundo y del futuro”, dice Frauky Jiménez Mazo, psicóloga clínica. 

Algunas investigaciones han dado a conocer que la pérdida de la pareja causa un dolor físico equivalente al de una quemadura o la ruptura de un hueso.

“Perder peso por un desamor, llorar, no querer comer, tiene más que ver con la personalidad de algunos. Hay gente a la que le pasa lo opuesto, termina por comer mucho más cuando está entusado, trata de llenarse de azúcar, de chocolates, por las endorfinas que otorgan”, dice la sexóloga Flavia Dos Santos.

La brasileña recomienda:  si usted tiene tusa y decidió “pasar hambre, llorar sus ojos y ponerse miserable porque fue dejado, lo más recomendable es que aproveche, compre un vestido de baño nuevo y se  vaya para un hotel con playa, para que por lo menos estrene cuerpo 90-60-90”. 

“Quienes no tienen una buena autoestima o no se consideran suficientemente interesantes, delegan y determinan que toda su razón o felicidad está en el otro.  En cambio cuando usted se siente bien consigo mismo, fue valorado siempre en su casa y desde niño se   ha sentido importante, no se dejará afectar de forma tan intensa”, agrega Flavia.

Un cóctel explosivo para el entusado es sumarle a la huelga de hambre una dosis de canciones de amor o cualquier tipo de sufrimiento innecesario, como el ayuno. Flavia  sugiere   buscar actividades que le proporcionen placer, como practicar un deporte, leer un libro, ver películas. ¡Que no sean románticas! “Hay que evitar  cualquier forma de sufrimiento innecesario y aumentar la confianza en uno mismo, creer que saldremos adelante,  que no es el fin del mundo y que uno puede sobrevivir a una tusa”, dice. 

Los hombres no tienen todos los síntomas del dolor femenino,  esa desesperación o necesidad de dejar de comer o comer demasiado. Sin embargo, la mujer sufre más intensamente por un período más corto, mientras que ellos  padecen con  menor intensidad por un tiempo más largo. Solo que disimulan.

Así describe el  panorama la actriz  Alejandra Azcárate: “Un hombre no acepta que está entusado, por  ego. Ellos dicen ‘fue una cosa de mutuo acuerdo, veníamos mal, pero ahora  somos muy buenos amigos. Y, eso sí, se van con un amigo y  amigas de dudosa reputación,  una caja de whisky o de guaro y llevan la procesión por dentro”. 

Mientras que “las mujeres le contamos a todo el mundo que estamos desgarradas. Nos confesamos con el portero, con el taxista, le pedimos consejo al esteticista, hacemos los análisis más paupérrimos de la relación y hasta alucinamos  con el personaje, al que vemos como flashes en todas partes”, anota. 

“Nuestra tusa como es a fondo y desde el alma nos quita el hambre, porque no hay nada que adelgace más que la ‘tusoterapia’, eso a usted lo deja seco”, dice Azcárate. 

Que lo diga Martha Isabel Bolaños, ‘La Pupuchurra’ (Yo soy Betty, la Fea), que le sacó partido a su ‘lipotusa’: “Uno se pone tan flaco, que por más que coma no engorda, porque es tanto el estrés que quién sabe para dónde se va la comida. Se ve uno más estilizado y  puede volverse a poner esos jeans que  le quedaban apretados”.

Dice que tras superar su tusa se puso las pilas: “Me puse más hermosa para no dejar que me vieran mal.  Una tusa te acaba, te mortifica, te tira a la cama, pero  es temporal. Como todo en la vida, pasa”.

“Una mujer entusada tiene  sueño de bebé, se levanta a llorar cada tres horas, con angustia”, Alejandra Azcárate, actriz, en su stand up comedy.

Hay otra razón para el extremo adelgazamiento del entusado: aparte del estrés y las sesiones de lágrimas, recupera su cuerpo. Ya no es “el cuerpo de la pareja” sino el de un solo individuo que ahora necesita responder por sí mismo sin ayuda. Y como salir a conquistar un nuevo amor se vuelve de repente una necesidad, muchos entusados cambian hábitos alimenticios, empiezan a hacer deporte y se reencuentran con el cuerpo que antes  cubrieron de capas y capas de rollitos.

En carne propia...

Vivió en un monasterio

“Antes de tener una vida romántica estable, por una tusa casi me vuelvo monje, yo era virgen y pensaba que ninguna mujer me lo iba a dar, me recluí en un monasterio  y  viví tres meses allí”, dice el comediante Iván Marín.

“De las cosas patéticas que hacemos los hombres es dedicar canciones. Yo entusado llamé a una emisora a pedir que le dedicaran ‘Esperanzas’, de Los Pecos, a mi novia. La llamé para que estuviera atenta, pero solo escuchó 30 minutos y el tema lo pusieron media hora después. Nunca la oyó”, agrega.

Vivió en un motel

Marín recuerda que a un amigo suyo, que tenía su esposa y su hija, su mujer le puso los cachos con el mejor amigo. El man se fue a vivir a un motel porque le daba pena volver a la casa de la mamá, duró dos meses allá. “No hagan eso, debe ser muy duro estar uno entusado y escuchar que otras parejas tienen sexo al otro lado de la pared”. 

Él les recomienda a sus congéneres no salir a buscar burdeles “porque eso es botar la plata. Tampoco ponerse a escuchar música, ni siquiera heavy metal, porque seguro con  el golpe fuerte de la música se acordará de los morados que ella le dejaba”.

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Colprensa
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Viernes, 17 de Febrero de 2017
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