“Anita, yo estoy muy feliz, ya casi me voy a ir para mi casa, voy a rehacer mi vida con mis cuatro hijitos, yo sé que él ya nos va a dejar tranquilos y vamos a poder vivir en paz”, estas fueron las palabras llenas de ilusión que Leydi Johana Soto le dijo a su hermana Ana Milena Soto, un día antes de que desapareciera el pasado 23 de mayo.
Lamentablemente todos los sueños que Leydi relató ese día en la casa de su hermana, en el barrio Los Naranjos, suroriente de Cali, se vieron interrumpidos por “él”, Jhon Alexander Zamora Díaz, hombre con quien hace apenas cinco meses había terminado una relación de 19 años y quien la llamó en la mañana de aquel jueves para decirle que saliera a recibir un dinero para la sustentación de los niños, tras meses de inasistencia alimentaria.
Pese a los muchos episodios de maltrato y amenazas que ya había recibido tiempo atrás de su parte, en las que hubo agresiones físicas y sexuales, acompañadas de insultos y frases como “tú solo vas a ser mía, de mí no te vas a librar”, Leydi confió en quien menos debió y salió, pero no regresó.
Su cuerpo sin vida amarrado con un lazo a la orilla del río Cauca, fue hallado por un pescador a la altura del sector El Doce del corregimiento Arauca, zona rural del municipio La Palestina, en Caldas, según reportó un informe de novedades de la Policía de Chinchiná. Posteriormente fue trasladado al Instituto de Medicina Legal de ese municipio, donde solo hasta el pasado miércoles se comprobó su identidad gracias al cotejo de las huellas dactilares.
El caso está siendo investigado como un presunto feminicidio y las autoridades están tras la pista de Zamora Díaz, principal sospechoso del hecho y autor de una serie de mensajes de texto que han sido enviados a los hijos Leydi, de 17, 15, 7 y 3 años, después de su desaparición.
Frente al hecho se pronunció el coronel Miguel Ángel Botía, subcomandante de la Policía de Cali, al asegurar que “esperamos el dictamen de Medicina Legal para imputarle el delito de feminicidio al responsable de los hechos. La Policía está tras la pista de este hombre y esperamos rápidamente obtener las ordenes de captura, para detenerlo y ponerlo a disposición de la Fiscalía”.
Ya van seis feminicidios en Cali
Una vez el caso de Leydi Johana Soto sea tipificado por la Fiscalía, se convertirá en el feminicidio número seis registrado en Cali este año y el segundo en menos de una semana, pues se suma a la muerte de Ana Elsy Panneso, mujer que fue agredida con arma de fuego el pasado Día de la Madre, al parecer, por su pareja sentimental. Ana Elsy falleció el pasado domingo en un hospital de la ciudad por la gravedad de sus heridas.
Solo el 22 de abril Yudy Magally González Villa, de 35 años, fue hallada sin vida en un canal de aguas residuales del oriente de Cali al que la habría arrojada por su esposo en medio de una discusión. El hombre fue capturado por la Fiscalía un mes después de los hechos, tras haberle imputado cargos como presunto autor del delito de feminicidio agravado.
La segunda semana del mes de febrero una menor de 4 años murió por una golpiza propinada por su padre y ese mismo mes se registró el doble feminicidio de Mayerli Cabezas Ramos, de 26 años, y su madre Ermencia Ramos, de 64 años, quienes fueron asesinadas con arma de fuego por el esposo de Mayerli.
