Desde este 18 de julio empezaron a regir las medidas de cuarentena y toque de queda en las principales ciudades del país, dado el aumento significativo de los contagios significativos y las muertes por Covid-19 de los últimos días.
En Medellín, donde la cuarentena empezó a regir desde el pasado viernes, se presentó un bajo flujo vehicular y de personas en las calles. Asimismo, disminuyó el transporte público en el Valle de Aburrá.
Se estima que entre la media noche y las 4:00 de la tarde del 17 de julio, la Policía impuso 606 comparendos en el Valle de Aburrá, 434 de ellos en Medellín. No obstante, la situación más crítica está en el municipio de Envigado, dado que la ocupación de camas UCI llegó a la capacidad máxima.
Por su parte, en Bogotá la Policía Nacional está haciendo monitoreo en los peajes de salida a los municipios aledaños de Cundinamarca, con el fin de evitar un mayor contagio en los pueblos cercanos a la capital del país.
Además, el pico y cédula se mantendrá el fin de semana en la capital. Las personas que tienen cédula impar podrán salir los días pares y los que terminan en cédula par, saldrán los días impares a realizar sus actividades en las zonas en las que no rige la cuarentena estricta.
Bucaramanga, por su parte, tendrá patrullajes en las zonas aledañas al área metropolitana, debido a que muchas personas están viajando a los municipios, esparciendo masivamente el virus.
También se busca garantizar la disciplina social y aplicar las sanciones correspondientes a quienes violen el aislamiento y toque de queda, pues se han reportado aglomeraciones que pueden terminar convertidas en un verdadero foco de contagio del Covid-19.
En cambio en Cartagena, el panorama suele ser diferente, pues no fue decretado el toque de queda, y además, se ha empezado el plan piloto de apertura de locales en centros comerciales.
Sin embargo, sí se decretó desde la medianoche del 16 de julio hasta las 11:59 del lunes 20 de julio la ley seca. El Distrito pidió a los alcaldes locales y autoridades locales y nacionales ejercer inspección, control y vigilancia en toda la ciudad, y de ser necesario, colocar los comparendos a los que haya lugar.
Por último, Cali la ciudad cuya situación de camas UCI es la más critica, pues su ocupación está en el 95 %, entró en toque de queda durante el puente festivo. De acuerdo con la Policía Metropolitana de Cali, hubo intervención en 562 fiestas y 58 de riñas y violencia intrafamiliar. La medida estará vigente hasta el martes 21 de julio a las 6:00 de la mañana.
