Testaferros y narcotraficantes asentados en Manizales, pero pertenecientes a una organización que surgió en Itagüí, Antioquia, en los 90, conocida como Los de la Montaña, se alistaban para enviar cerca de una tonelada de cocaína al exterior.
La operación de narcotráfico fue descubierta a través de una unión de fuerzas entre distintas especialidades de Policía, labores de inteligencia e interceptaciones.
La misma permitió llegar a los presuntos autores intelectuales de la muerte del excomisario de Policía José Fernando Aguirre, ocurrida el año pasado en el barrio Caribe de Manizales. Fue jefe de la Unidad de Homicidios de la Sijín. Por este crimen condenaron a Gustavo Adolfo Romero, alias el Rolo, a 19 años y 10 meses.
Los hallazgos llevaron a que se realizara de manera simultánea una operación policial en las selvas de Chocó y en Manizales la semana pasada. La investigación está a cargo de una fiscalía especializada contra el crimen organizado de Medellín, donde les imputaron cargos a ocho hombres y a una mujer por concierto para delinquir, narcotráfico, homicidio y porte ilegal de armas de fuego.
En esta investigación volvió a surgir la figura de alias Guacamayo, recluido en la cárcel de Manizales por el hurto al apartamento del exsenador Ómar Yepes y cuya cuantía es motivo de discusión, pues el dinero reconocido como robado no coincide con las informaciones que han revelado personas capturadas por estos hechos.
Alianza con el Eln
La semana pasada la Dijín y el Ejército se internaron en las selvas del Chocó con el objetivo de capturar a hombres del Eln que tenían a cargo el manejo de un laboratorio para el procesamiento de la cocaína.
De acuerdo con la información que posee la Fiscalía, existía un negocio pactado entre un testaferro, alias Víctor, quien figura como propietario de un importante club nocturno en la zona de los moteles de Manizales; y alias Danilo, comandante del frente Resistencia Cimarrón del Eln, para la producción de una tonelada de cocaína, que saldría con destino a Estados Unidos por el Pacífico.
Se conoció de un adelanto de $300 millones que a través de un sujeto de confianza llamado Fernando fue enviado a ese grupo que delinque en el Alto y Medio Baudó, que abarca el centro y sur de Chocó.
En la operación se dio captura a tres guerrilleros del Eln y se destruyó el laboratorio con los insumos y elementos usados para la producción de la droga.
Imputados por homicidio
El nombre de alias Guacamayo está asociado al grupo que negociaba con el Eln. Debido a las interceptaciones se encontraron elementos de prueba para sospechar que este puede estar vinculado a la muerte del comisario Aguirre.
Se recuerda que la víctima estaba retirado de la institución, pero su hoja de vida daba cuenta de su eficacia al frente del grupo de homicidios de la Sijín de Manizales.
Interceptaciones telefónicas iniciadas en Bucaramanga revelaron que había un plan para atentar contra una persona en Manizales. Los sicarios contratados pertenecían a la banda los Pelusos, disidencia del Epl y cuyas acciones y presencia son reconocidas en la región del Catatumbo.
Aunque las alarmas se encendieron para prevenir el homicidio, los esfuerzos de las autoridades resultaron inútiles, pues desconocían la identidad de la víctima. A Aguirre lo asesinaron de cuatro disparos en una carnicería del barrio Caribe, el 3 de mayo del año pasado.
Alias el Rolo, capturado como autor material del hecho, aceptó su responsabilidad, pero no reveló los motivos del crimen. La investigación continuó y se encontraron indicios acerca de los autores intelectuales.
Tras las rejas
Ocho hombres capturados en la operación fueron enviados a la cárcel de Pereira, mientras que una mujer está recluida en Manizales.
