Muchos de los estudiantes de grado 11° en todo el país están a puertas de tomar una importante decisión que probablemente definirá su futuro laboral. César Osorio, docente universitario y psicoterapeuta, hace varias recomendaciones para los estudiantes.
El primer dilema al que se tienen que enfrentar muchos de los adolescentes colombianos es hacer el contraste de su vocación con los ingresos que ofrece esa profesión en el mercado laboral, ya que en algunos casos, la remuneración para cada una es muy diferente.
Según cifras del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), profesiones de carreras como Medicina e Ingeniería Electromecánica o de Minas tienen un promedio de salario mensual más elevado que el de otras carreras universitarias.
“Lo primero, es que el aspecto económico y la pasión deben ser dos razones para tener en cuenta a la hora de tomar una decisión. No podemos olvidar el sistema en donde nos movemos, un trabajo debe representar una fuente de ingresos para la persona...”, aseguró el psicólogo de la Universidad del Rosario César Osorio.
"Sin embargo, siempre será mucho más importante la vocación. Debo pensar en mi pasión para después buscar el equilibrio con lo económico. Si prima el dinero, hay muchas posibilidades de que la persona resulte frustrada", afirmó Osorio.
Además, es evidente que estamos en un país donde salir de ciertas universidades pesa para conseguir trabajo. Para algunas empresas, el nombre de una institución muchas veces habla del nivel de formación que se puede recibir.
Según recomendaciones de los expertos, es aconsejable investigar sobre la trayectoria y reconocimientos que ha adquirido el programa, observar cómo se desenvuelven sus egresados en el mercado laboral y el nivel de investigación de la universidad en el área que se desea estudiar.
"Es muy útil hablar con egresados para escuchar recomendaciones, quienes trabajan en el mercado son los que realmente saben cómo está la situación en el ámbito laboral y pueden brindarnos un panorama", aseguró el psicólogo.
Factores para tomar la decisión
Según César Osorio, estos son los principales aspectos que los jóvenes deben tener en cuenta para escoger su carrera universitaria:
1. Sentir pasión por eso que quiero hacer. Saber si estudiar esa carrera me produce bienestar emocional.
2. Sentir que se tienen habilidades para ello. Determinar si se cuenta con destrezas para el área a desempeñar.
3. Pensar en el otro. ¿Esta profesión que voy a desempeñar tiene un impacto positivo en la sociedad?
4. Mi carrera tiene que ver con lo que yo soy, va de acuerdo con mi identidad. "Si yo toda la vida he sido una persona artística, mucho más subjetiva, que va a la creatividad y a la imaginación y decido estudiar matemática pura, esa decisión no va de acuerdo con lo que yo soy", ejemplificó Osorio.
Cambio de carrera
Para muchos padres, es una ‘tragedia’ cuando el adolescente decide cambiar de carrera, esto debido al gasto económico que representa. Sin embargo, debería entenderse como una situación común para varios jóvenes, pues muchas veces es necesaria la mediación de un profesional en orientación vocacional para reducir esa probabilidad de deserción del programa académico.
"Cambiarse de carrera no es un problema grave, a los padres hay que llevarlos a entender que sus hijos se pueden equivocar, son seres humanos. Si no se ha hecho un proceso de guía adecuado, el adolescente no es el correcto para tomar una decisión. Todos en esa época de la vida somos un poco ‘caóticos’", afirmó Osorio.
Test de orientación vocacional
Los test vocacionales son muy útiles cuando se ofrece un acompañamiento, sin embargo, no se pueden tomar como una verdad. Hacer pruebas por internet, sin una adecuada retroalimentación, no es una verdadera fuente de confiabilidad para determinar el futuro profesional de un individuo, se debe tener en cuenta el contexto personal. "No siempre se es feliz haciendo cosas en lo que se es bueno", asegura el experto.
"Mis padres me obligan a estudiar cierta carrera"
Varios padres de familia no están de acuerdo con el ingreso a algunos programas académicos por algún tipo de miedo personal. Otras veces limitan su apoyo económico a un área específica de estudio.
El principal consejo es llegar a un consenso entre ambas partes para buscar una solución. Si esto no se logra, es pertinente recurrir a una mediación profesional para evitar cualquier conflicto familiar innecesario.
“Es importante que se busque ayuda profesional. Llevar una persona obligada a una carrera es un error fatal, los niveles de frustración serán muy altos y vamos a tener malos profesionales a futuro. Esta es una decisión personal, es preferible correr el riesgo de que la persona tome una decisión equivocada”, afirmó el especialista.
Tomarse un tiempo antes de iniciar una carrera
Generalmente quienes ya tienen su decisión clara no suelen tomarse el tiempo. Sin embargo, personas que no lo tienen tan claro pueden tomarse una época para prepararse de alguna manera y poder enfrentar su mundo laboral, un ejemplo son los idiomas. Adquirir habilidades para mejorar su perfil académico no es un problema antes de ingresar a la educación superior.
Para los expertos, viajar o tomarse unas vacaciones no es inconveniente, siempre y cuando, la persona lo tome como un espacio de relajación y no como un escape frente a la decisión de asumir el mundo laboral.
Sin embargo, si la persona está en una crisis, está confundida y no tiene claro qué decisión tomar, es necesario que se tome un tiempo para poder realizar una orientación con un profesional y así lograr mayor acertividad en la decisión.
Capacitarse, viajar u organizarse y trabajar en uno mismo puede ser una mejor opción que tomar una decisión sin total seguridad.
