El sujeto que presuntamente habría cometido el crimen de Natalia Jiménez y Rodrigo Monsalve, pareja de esposos que fue asesinada en la vereda Perico Aguao en Santa Marta, se entregó al Ejército en la noche de Navidad (24 de diciembre).

Según reportes, el hombre estaría a disposición de la URI en la Fiscalía en Santa Marta. Según la Policía Metropolitana de Santa Marta, el confeso es integrante de un grupo dedicado a la delincuencia común. 

La policía está cotejando el testimonio con las pruebas encontradas hasta el momento para establecer la veracidad de su versión de los hechos.

Medicina Legal ya había entregado un informe preliminar indicando que la pareja habían viajado a la zona para celebrar su matrimonio en las Playas de Palomino, donde fueron baleados en la cabeza.

“Los antropólogos fueron asesinados y encontrados en Perico Aguao. La Fiscalía hizo entrega del oficio para que los padres los reclamaran (...) La Fiscalía sigue trabajando en el proceso investigativo a fin de poder identificar a los autores o partícipes de esos crímenes y poder judicializarlos pronto”, señaló Diana Quiñonez, directora de la Fiscalía seccional del Magdalena.

Tras el crimen de los ambientalistas, el ministro Carlos Trujillo anunció medidas para afianzar la seguridad en el área de esta vereda del Magdalena.

La pareja de antropólogos y activistas ambientalistas desapareció el pasado 20 de diciembre, cuando se movilizaban por la Troncal del Caribe, rumbo a Palomino. 

Lo último que se supo fue que Jiménez hablaba con su padre por teléfono cuando se escucharon gritos y amenazas. Ahí se cortó la comunicación.

Días después, un indígena de la zona vio a un grupo de buitres merodeando una palmera, a pocos metros de la playa. 

Se acercó y vio a dos personas que estaban atadas a un árbol y sus rostros estaban cubiertos con capuchas. Medicina Legal confirmó después que se trataba de la pareja de esposos.