El Consejo de Estado admitió una demanda de pérdida de investidura contra el candidato presidencial del Centro Democrático, Iván Duque y contra su mentor y jefe de partido, Álvaro Uribe Vélez.
En la de Duque, se conoció que fue interpuesta por Adriana Posso Rodríguez, quien se fundamentó en la presunta inasistencia del senador Duque a las sesiones plenarias del Congreso de la República.
Según la demanda, el hoy candidato faltó a nueve sesiones plenarias entre el 14 de febrero y el 20 de junio de 2017, sin que hubiera una justificación válida para ello.
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Este proceso podría ser una verdadera complicación para el aspirante uribista, que de perder la investidura, quedaría inhabilitado para posesionarse como presidente, si es que gana las elecciones.
La de Uribe, fue una demanda interpuesta por Nixón Torres Carcamo, que sustentó que el expresidente no justificó su inasistencia en las votaciones entre el 16 de marzo y el 20 de junio del 2017, así como en el primer periodo de la legislatura del 20 de julio al 16 de diciembre del 2017.
De prosperar, Uribe no podría revalidar su credencial como senador.
Los augurios no son positivos para los dos políticos, pues a comienzo de este año, el Consejo de Estado falló en contra de la investidura de la representante de La U, Luz Adriana Moreno, que perdió su curul por ausentarse injustificadamente del recinto de la Cámara.
Sin embargo, estas actuaciones no son extrañas en el Capitolio: asistir a la sesión, contestar los llamados a lista para verificar el quórum para posteriormente irse cuando llega la hora de votar.
Dice la ley que sin son más de seis sesiones plenarias, en las que se haya aprobado una iniciativa y el congresista desaparece sin razón, debe perder su curul y decretar su muerte política, como pasó con Moreno.
URIBE RESPONDIÓ
Por medio de sus redes sociales, el expresidente Álvaro Uribe Vélez se pronunció frente a este nuevo proceso en contra: “Por razones de conciencia, no puedo votar el acuerdo con las Farc”.
Aunque no explicó por qué se ausentó de las sesiones, en vez de votar en contra de los proyectos, Uribe cuestionó al abogado que entabló la denuncia, calificándolo de contratista del gobierno.
