Cuando se es parte de alguna de esas entidades donde sus miembros, independientemente de sus labores cotidianas, se solazan en actividades que alimentan el espíritu, es fácil observar fijamente a sus mayores y pensar que toda su vida la dedicó a hacer el bien y a buscar la grandeza de su suelo.
Están ellos en concordancia con lo expresado por un político colombiano del siglo XIX cuando afirmaba: “Ustedes no se imaginan la satisfacción que eso produce. Mirar hacia atrás y observar que toda la vida estuvo dedicada a una sola cosa, y que esa cosa es eminentemente buena para la patria”. Son ellos amigos en la Academia de Historia de Norte de Santander que esta semana cumplen años:
1. Luis Eduardo Lobo Carvajalino. Hoy 12 de septiembre, este ingeniero industrial de la Universidad Industrial de Santander -UIS-, e ingeniero civil del Case Institute of Technology, nacido en Ocaña, cumple 87 años de vida, una vida dedicada al estudio, la docencia, el periodismo, la literatura y la historia.
Cuando uno ve a Lobo Carvajalino transitar solitario por las calles de Cúcuta, difícilmente se puede creer que una persona tan sencilla tenga en su haber un palmarés brillante como el que exorna su personalidad: allá en la UIS fue estudiante, docente, decano y rector, como también fue rector en la Universidad Francisco de Paula Santander -UFPS-. Como periodista tuvo una columna titulada “Tribuna universitaria”, en Vanguardia Liberal, la que varias veces fue elogiada por Abdón Espinosa Valderrama; en el diario La Opinión, de Cúcuta, tuvo una columna titulada “Ámbito regional”, donde ventilaba temas del departamento.
En su haber también se cuenta haber sido director de la Escuela de Ingeniería de la Universidad Nacional de Colombia, asesor en Venezuela de la Escuela de Ingeniería de la Universidad de Oriente, e ingeniero de Consultores Ebasco International Corporation, en New York. Ha publicado libros en diferentes disciplinas del saber.
2. Pablo Emilio Ramírez Calderón. El próximo viernes 15 cumple 90 años de edad. Hace algunos años no era tanto su amigo como sí un buen lector de sus obras, hasta que en la Academia de Historia estrechamos lazos de amistad que hoy nos convierte en buenos contertulios tanto en su residencia, en la sede centro de la Academia y en Ocaña. Sus libros “Historia de la cirugía en Norte de Santander” y “Bavaria en Cúcuta, un superestado dentro del Estado”, por ejemplo, fueron oportunos y siguen siendo un deleite para curiosos. Es columnista del diario La Opinión y lo fue del extinto Diario de La Frontera. Sería prolijo enumerar su trayectoria vital y para ello remito a la solapa del primer libro citado.
El próximo jueves 14 la Academia de Historia convoca a sus miembros a celebrar sus cumpleaños a los académicos Pablo Emilio Ramírez Calderón, Iván Vila Casado y José Antonio Amaya Martínez.
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Hago votos por el pronto restablecimiento de la salud del amigo y secretario de la Academia de Historia de Norte de Santander Gustavo Gómez Ardila, quien con éxito fue intervenido quirúrgicamente en Bogotá el pasado fin de semana.
