La Opinión
Suscríbete
Elecciones 2023 Elecciones 2023 mobile
Columnistas
El centenario de Otto Morales
Uno de los colombianos mas influyentes de la segunda mitad del siglo XX y parte del XXI.
Jueves, 30 de Julio de 2020

El siete de agosto próximo, se cumple el centenario del nacimiento de Otto Morales Benítez, uno de los colombianos mas influyentes de la segunda mitad del siglo XX y parte del XXI.

Había nacido en Riosucio, Caldas, habiéndose traslado a Medellín a la Pontifica Universidad Bolivariana, en donde cursó sus estudios de Derecho, para iniciar luego el mas extenso periplo profesional que lo consolidó como personaje de una gran influencia en la vida pública colombiana.

Pronto llegó al Congreso a representar a su Departamento, y allí comenzó una brillante carrera que lo fue proyectando, gracias a su enorme capacidad de estudio que lo colocaba rápidamente en el centro de los mas importantes debates, en donde podía destacarse como un aventajado erudito, en medio de sus condiciones de orador, de jurista y de hombre de letras, poseedor de una cultura universal de grandes proporciones.

Otto, con su inteligencia, preparación, y con la influencia de su atrayente personalidad, se convirtió en toda una celebridad del Congreso de Colombia y de allí lo sacaron en dos oportunidades los presidentes de turno para que fuera ministro, primero de Trabajo y después de Agricultura. En esas carteras se compenetró con el país entero; su contacto con trabajadores de las ciudades y con campesinos, lo convirtieron en un hombre capaz de entender todos los fenómenos sociales del país, cuyos análisis los tradujo en cientos de textos en donde reflejaba el sentimiento de la Colombia humana y mestiza, y que supo llevar a los mas encumbrados foros internacionales, en donde su pensamiento logró consolidarse con una dimensión continental. 

Fue una persona muy cercana de presidentes como Eduardo Santos, Alberto Lleras, Carlos Lleras y Belisario Betancur, este último su compañero inseparable desde las bancas universitarias y mutuamente se decían con jocosidad  “godo” y “cachiporro”.

En Bogotá, después de haber dirigido el Partido Liberal y después de haber sido candidato a la presidencia de la República, ocurrió su retiro político.

Falleció a los 96 años, en pleno uso de sus facultades y cuando Colombia entera lo identificaba como uno de los intelectuales más valiosos en todos los tiempos. Dejó 140 libros publicados, perteneció a todas las academias importantes del país y le dio lustre a todos los escenarios a los que estuvo vinculado.

Esa imagen de Otto Morales, cuando irrumpía en las reuniones sociales, políticas o académicas no se olvidará nunca: llegaba impecablemente vestido, con sobretodo, elegante sombrero, portafolios de cuero, y exhibía una enorme sonrisa que inmediato contagiaba de alegría a todo el auditorio, que solía ponerse pie para recibirlo con sonoro aplauso. Siempre encontraba gracejos para dirigirse a las personas o como preámbulo a sus intervenciones, y todo el mundo quería escucharlo, estar cerca de él, disfrutar de su enorme personalidad que tanto impactaba.

Temas del Día