La Opinión
Suscríbete
Elecciones 2023 Elecciones 2023 mobile

¿La culpa es de Pandora?

¡Cómo juega el destino con nosotros! 

Una vieja leyenda cuenta que Pandora, obsesionada por la curiosidad, quiso saber el contenido de un ánfora que le encomendaron guardar en secreto; la abrió, y de ella brotaron los males y se dispersaron por el mundo. Y los valores, decepcionados de los hombres, se refugiaron en las moradas de los dioses para aislarse de ellos: el único que quedó, en el fondo, fue la esperanza. 

Lo cierto es que, ahora, se renueva la vigencia de los mitos y nos ofrecen una interpretación de la controversia entre fuerzas encontradas, la maldad y la bondad, en una lucha constante –con el ser humano en el medio–.

Desde la Biblia, con la manzana tentadora a Eva y la artimaña de prometerle poder, pasando por Egipto y Mesopotamia, Oriente Próximo, la Mitología Griega y la Edad Media, la historia de la fatalidad está sembrada en los anales del tiempo. 

De manera que la literatura posee el secreto de la eterna batalla entre el bien y el mal y que, en especial los autores clásicos, han intentado explicar, en sagas y fábulas, porqué el ánfora se cerró para que –justo– no se saliera la esperanza.

¡Cómo juega el destino con nosotros! Conoce nuestra debilidad mayor, la vanidad, y su peor consecuencia, la soberbia, para someter a la humanidad con desastres y desgracias si no se redime con humildad y espera la dote dadivosa del destino, para ennoblecer su propia libertad.  

Qué bueno será aprender a soñar con una mitología para un mundo en paz, pleno de justicia, precursor de gestiones solidarias que lo liberen de los padecimientos, convocando a los valores a alojarse –nuevamente- en la sociedad.

Lunes, 10 de Agosto de 2020
Premium-home
Patrocinado por:
Logo Empresas
Temas del Día