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Las puertas están abiertas
Ten confianza en ti mismo y comprende que todo pasa para algo. Respira e inspírate en el don de la paciencia. El tiempo es la mejor medicina para reparar los dolores del alma y sanar heridas.
Jueves, 9 de Agosto de 2018

La vida es tan fácil como tú quieres que sea. 

Desde el Amor la vida se hace más sencilla. 

No se juzga, no se señala, no se critica. Desde el Amor se construye, se repara, se edifica.Desde el Amor comprendemos a los demás porque sabemos que son tan imperfectos como nosotros.Desde el Amor declaráramos inocentes a quienes nos hieren, les perdonamos y nos retiramos a rodearnos de gente amable. Desde el Amor se habla claro y se pisa fuerte para dejar huella. Hoy, prueba vivir desde el Amor y encuentra la felicidad a la vuelta de la esquina. 

La fórmula de la felicidad que propongo desde la experiencia, es una simple pócima de ingredientes como la fe, la actitud, la alegría, la confianza, él positivismo y el importa-culismo. No te desgastes queriendo saber lo que las otras personas piensen de ti o buscando la aprobación ajena de tus decisiones, actos o pensamientos. Son tuyos. Eres tú el protagonista de tu propia obra de teatro que fue escrita desde la germinación de tu semilla.

Ten confianza en ti mismo y comprende que todo pasa para algo. Respira e inspírate en el don de la paciencia. El tiempo es la mejor medicina para reparar los dolores del alma y sanar heridas. Ningún mal dura tanto como para amenazar tu existencia. No si tú no conviertes esa circunstancia en un dragón que cobra poder y tamaño cada vez que se alimenta de tus miedos y temores.

La vida es dinámica y eso la hace divertida. Acepta los cambios o mejor aún, provoca los cambios; Atrévete a saltar al vacío con esa idea, proyecto o la necesidad de nuevas emociones que pide tu lado aventurero que te empuja a salir de la zona de confort para probar tus destrezas que no conoces. Por más buena o mala que sea una situación, algún día cambiará. Ten siempre un plan B o descubre tus capacidades para improvisar. También vale.

Ponle color a tus días, vístete de sonrisa; prueba el sentido del humor perdiendo el temor al ridículo y experimenta en los demás levantando en ellos sospechas de tu nuevo estado. Rompe los esquemas, vístete diferente, cambia de look, descubre el payaso que hay en ti y no te tomes la vida tan en serio, igual no saldrás vivo de ella.

Vive simple; sin la necesidad de cuestionarlo todo, evitando el “por qué” y utilizando más el “para qué”. Suelta la necesidad de controlarlo todo y de gobernar la vida de los demás permitiéndote que hagan las cosas a su manera y no a la tuya. Recuerda que cada quien tiene su estilo y eso no es en contra tuya. Hay cosas que se puede modificar y otras que no. Dentro de ellas están las personas que amamos. Hazte la vida fácil y más amable para ellos queriéndolos como son, no como tú quieres que sean, aprovechando que aún está a tu lado. Déjalos ser, vive y deja vivir. También se puede ser feliz desde el balcón.

La felicidad es la vida, y el truco en la vida es vivir feliz; todos nacimos felices; solo que las diferentes condiciones nos han ido cambiando. Es hora entonces de vivir felices para permanecer felices. Analiza cada mañana si eres feliz y por la tarde pregúntate si estás feliz. Recuerda que la felicidad es un estado que debe perdurar en todas nuestras etapas. La idea del juego de la vida es que nacimos felices y debemos llegar a viejos felices. De hecho, la idea principal es llegar a viejos y no dejar nuestra existencia en la mitad del camino a merced de los cuervos que festejaran con sus graznidos el triunfo del estrés que arrebató una vida joven.

Ama, simplemente ama. Toda la alegría que puedes recibir está en al amor que estás dispuesto a dar, ese es el secreto; ama. Es sencillo; ama. Cuando lo dejas de hacer pasa exactamente lo que no te gusta. Así que ama. Dios te ama. Te ama infinitamente. Y te ama, así como eres. No te olvides; Ama, como te ama Dios; el amigo que te quiere y se preocupa por ti. Todo lo que verdaderamente importa al final es que hayas amado.

Ante momentos de oscuridad busca la luz; sal todos los días. Los milagros están esperando en todas partes. Según la proporción de tu fe y la iluminación de tu alma con momentos de reflexión, oración y contemplación, habrá un tiempo destinado para la reparación de tu área afectada. Enciende la luz, eleva tu estado de conciencia a través de la meditación y así estarás alerta para ver las señales e interpretar las respuestas puesta a veces en libros, a veces en personas, en frases, en mensajes, etc. Todo depende de tu elevación vibracional. En estados de confusión aléjate del mundo terrenal y procura conectarte con la fuente suprema y divina que te dará una luz sanadora y reparadora, por lo menos de tu estado emocional.

Los problemas y las enfermedades son como los dragones; no existen. Nosotros los creamos en nuestra mente, y con nuestros miedos y temores los alimentamos y toman poder. Desde ese estado, vemos una figura enorme que nos quiere devorar, aplastar y robar nuestros sueños. Pero en realidad, no existen. Son creaciones etéreas que podemos desaparecer tan solo llenándonos de confianza, seguridad y firmeza ante la realidad. Una realidad que te recuerda que tú eres un ser humano que SÍ existe. Y que está lleno de valores convertidos herramientas para ver cómo el amor, la fe, la oración, la inteligencia, la creatividad, etc. Al final ningún problema es tan grave que no se pueda resolver tan solo con ignorarlo.

Si sientes que se despierta un sentimiento de envidia y no lo identificas a tiempo para evacuarlo de tu ser, se plantará allí como un huésped no invitado; y a partir de allí vivirás pensando que siempre el jardín del vecino será mejor que el tuyo. Y es porque no te has enfocado en quererlo, cuidarlo, sembrarle nuevas semillas; contemplarlo. La envidia es un sentimiento de gente pobre de espíritu; tú eres rico en esa área. No caigas en la trampa.

Si ves que pasa el tiempo y aún no llega lo que estás pidiéndole al universo; eso que tú crees es la perla de tu felicidad, quizás no lo es; o por lo menos, no para ti. Revisa si lo estás pidiendo porque ves que a otro le funcionó. Ahí recuerda que somos distintos y venimos de diferentes moldes. Tenemos propósitos distintos y seguramente a ti no te conviene eso que tan obstinadamente deseas. Suelta y deja a Dios ser Dios. Permítele jugar su rol y déjate sorprender. Quizás lo mejor está aún por llegar; ten fe y continúa preservará do con fuerza, actitud y paciencia.

Los estados de ánimo dependen totalmente de la información que le quieras proporcionar a tu cerebro. Identifica siempre que sientes antes de decretarlo en voz alta. Si identificas la tristeza, ilumina ese sentimiento con una sonrisa y vístete de colores ese día. No se trata de qué piensas sino de cómo te sientes. Y si tú piensas que estás bien, te sentirás bien. Las circunstancias son más o menos amenazantes desde el ángulo donde te ubiques. Tú eres tan inteligente que puedes confundir a esos dragones imaginarios con una actitud positiva. Sonríe, actúa seguro. Como si todo estuviera bien. En pocos minutos te sentirás bien.

Esa necesidad constante de tener la razón le encanta al ego. Tener la razón da poder en los débiles porque creen en su superioridad intelectual y se alimentan de auto reconocimientos. Cuando tu cedes esta condición, les haces creer que ganaron el duelo de la sabiduría y se retiran con su corona de papel a segur buscando su aliento en otros. Quédate con tu verdad y cede esa insignificante victoria a ellos. Que se encarten con esa carga.

No esperes a que venga un alguien a recordarte lo maravillosa que es tu vida, tu hogar, tu familia, tus logros y tus capacidades. Dale gracias a Dios porque tienes vida, salud y esperanza de poder seguir luchando para alcanzar tus metas. Valora tus esfuerzos y reconoces tus resultados como una magnífica obra realizada por tus manos, con la guía y la luz de tu propia fe.

Recuerda, Todo pasa. 

A cualquier circunstancia en tu vida, ponle fe, actitud, alegría y la seguridad de que con Dios en tu corazón Todo esta bien. 

Hakuna Matata

JMC

El próximo viernes 17 de agosto presentaré o en Cúcuta un taller de Conexión personal donde entregamos la llave maestra de la felicidad.

Esa que está en ti.Este taller será el desarrollo de nuestro nuevo libro “Las Puertas están Abiertas”. Informes para el taller:

WhatsApp 3502653536 - 3203069622

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