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Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación o Colciencias con un nuevo nombre
El nuevo Ministerio no puede ser el actual Colciencias con otro nombre. No debe tener ni los mismos objetivos, ni la misma estructura, ni las mismas funciones del actual Colciencias. 
Viernes, 5 de Julio de 2019

Por demás está decir la inmensa satisfacción que causó en la comunidad académica la aprobación en el Congreso de la Ley 1951 de enero 24 de 2019, presentada primero a la Cámara, cuando era representante y luego al Senado, como senador, por el senador Iván Agudelo. Esta satisfacción no estuvo exenta de preocupación cuando en el último momento de la discusión en el Senado se le introdujo la modificación de que se creara a partir de la actual Colciencias. Llama la atención que columnistas de diarios nacionales al hacer un balance de la gestión del actual Congreso, den como positiva la creación de dos ministerios y a renglón seguido digan que son la transformación de Coldeportes en el Ministerio del Deporte y de Colciencias en el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación.  Si esto último es así, no se habría hecho nada significativo y todos los esfuerzos de la comunidad científica y todo el trabajo del senador Iván Agudelo serían nugatorios.

Precisamente en la tercera semana de junio, el senador Agudelo convocó a una audiencia en el Congreso de la República para que los interesados pudieran hacer sus aportes a la reglamentación de la Ley. La Asociación Colombiana de Facultades de Ciencias (ACOFACIEN), en cuyas aulas se forman los futuros científicos e ingenieros colombianos, presentó los siguientes puntos para incluir en dicha reglamentación:

El nuevo Ministerio no puede ser el actual Colciencias con otro nombre. No debe tener ni los mismos objetivos, ni la misma estructura, ni las mismas funciones del actual Colciencias. 

La Ley aprobada, ordena que el primer objetivo del Ministerio es dictar los lineamientos de la política pública de Ciencia, Tecnología e Innovación y su segundo objetivo específico es definir las bases para la formulación de un Plan Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación para que Colombia se inserte como país en la sociedad del conocimiento del siglo XXI. En Colombia no ha existido una política de Estado en lo que se refiere a la Ciencia, Tecnología e Innovación, de manera que cada Gobierno formula sus propias propuestas. Esta Ley ordena la construcción de política de Estado que creemos debe ser propuesta por una comisión similar a la actual Comisión de Sabios, pero que incorpore en su seno representantes de los gremios de la producción, científicos sociales y pensadores, líderes de opinión, políticos y representantes de la sociedad en general, que en forma solidaria deberán construir una hoja de ruta clara. 

La tercera propuesta es que un objetivo fundamental del Ministerio sea hacer un seguimiento continuo, oportuno y eficaz de la forma como la política de Estado, así formulada, se traduce en acciones que deben ser sometidas a evaluación a través de indicadores previamente establecidos.

Por último, el Ministerio debe asegurar la financiación con dineros públicos, sin perjuicio de que pudiere haber contribución de recursos privados, de la investigación en ciencia básica y aplicada o aplicable y, de la misma manera, con fondos mixtos del Estado, la empresa privada, la banca, los gremios, etc., la financiación de la investigación en tecnología, innovación y emprendimiento. Es importante que a través de un trabajo conjunto del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación y el Ministerio de Educación se aseguren las plazas para los nuevos doctores que están formando nuestras universidades y los que regresarán de la actual convocatoria para maestrías y doctorados en universidades reconocidas de la lista de Shanghái. Los doctores son importantes para la formación de los estudiantes de ciencias, de las ingenierías, de las ciencias de la salud, de las ciencias de la tierra y de las ciencias agropecuarias que son básicas para la seguridad alimentaria de nuestra población y para la economía y las exp
ortaciones. 

Estas recomendaciones son parecidas y complementarias a las que se han hecho desde el Comité de Ciencia y Tecnología de la Academia Colombiana de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales (ACCEFYN).

Estas recomendaciones se complementan con una propuesta de Alberto Ospina Taborda, primer director de Colciencias, en una grata conversación en la me decía que la única forma de asegurar una política de Estado era a través de un Conpes, que defina la política para los próximos 10 años. Debemos compartir esta propuesta que Ospina está presentando a Agudelo para su consideración.

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