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Shabbatina desde USA | Tradiciones y recuerdos

Un total de casi 3.000 víctimas murieron incluyendo 19 terroristas.

Estimados lectores: 

El fin de semana pasado no pude escribir esta columna por razones médicas pero gracias a Dios y a mis médicos ya estoy bien.  Iba a comentar  sobre el decimonoveno aniversario del vil ataque que condujeron los discípulos de Osama Bin Laden sobre las bellas Torres Gemelas de New York, el edificio del Pentágono y un accidente en un campo del Estado de Pennsylvania cuando los pasajeros se rebelaron contra los terroristas que se habían tomado el avión.  Un total de casi 3.000 víctimas murieron incluyendo 19 terroristas que usaron los aviones jets como grandes bombas volantes llenas de combustible al estilo de los pilotos kamikaze en el teatro del Pacífico de la Segunda Guerra Mundial. La novedosa táctica se basaba en que los aviones ¡no necesitaban combustible para el vuelo de retorno!  

De acuerdo a la revista “The Atlantic”, Trumpoloco se refirió con las palabras “suckers” y “losers” a los militares muertos en las guerras que han peleado los EE. UU.  La primera (“suckers”) se traduce como tontos o “giles” como dicen los gauchos y chilenos.  La segunda, “losers”, es perdedores.  En todo caso, que el Comandante en Jefe de las tropas estadounidenses se haya referido a sus soldados muertos de esta manera es no solamente una vergüenza sino una gran canallada, especialmente viniendo de una persona que evadió prestar el servicio militar durante la guerra del Vietnam porque ¡tenía problemas con sus juanetes! 

Y ésta no es la primera metida de pata: hace un año Trumpoloco insultó a la familia de un héroe que murió en Afganistán y al Senador John McCain (q.e.p.d.) lo llamaba un perdedor porque fue capturado en la guerra de Vietnam cuando los norvietnamitas derribaron su avión y lo torturaron durante cinco años y medio.  Rehusó atender a sus honras fúnebres o ir a ver el ataúd mientras estuvo en el Capitolio.  Al fin, a regañadientes, tras la insistencia de sus consejeros y asesores, concedió dar la orden de bajar a media asta las banderas de todas las instalaciones federales.

En junio de 2019 durante las celebraciones de los 75 años de la Invasión de Normandía durante la Segunda Guerra Mundial (el famoso D-Day en inglés) refunfuñaba porque tenía que ir a una ceremonia en un cementerio militar aliado porque “ahí no había sino giles y perdedores”.  Afortunadamente las fuertes lluvias que estaban cayendo sobre la zona no le permitieron viajar en el helicóptero presidencial.  ¡El mal tiempo le salvó la cara!

Este atardecer es el comienzo del Rosh Hashannah, el principio del año hebreo cuando según la tradición hebrea Dios empezó la creación del mundo.  El gran evento de esta fiesta es cuando suenan los shofares, cuernos de carneros, para llamar la atención de los fieles a adorar a Dios y a pedir perdón por sus pecados. Pero como este año cae en Shabbat, los shofares no sonarán sino este domingo.  La tradición indica que Dios en Su infinita misericordia y sabiduría escribirá en el Libro de la Vida los nombres de la gente que va a sobrevivir este año venidero y en el Libro de la Muertes los que van a morir.  Este período de 10 días culmina con el Yom Kippur, el Día del Arrepentimiento, que es el día más sagrado de la tradición hebrea.

La próxima semana les comentaré acerca de dos nuevos libros sobre Trumpoloco: “Desleal” del exabogado personal Michael Cohen y “Rabia” del periodista Bob Woodward de la famosa era de Watergate. Y acabo de leer en este periódico que otra mujer le está poniendo un juicio de tutela por abuso sexual en su suite del U.S. Open de Tenis de 1997.

¡Hasta la próxima semana y que Dios los siga protegiendo!

shabbatinas@gmail.com

Domingo, 20 de Septiembre de 2020
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