La Opinión
Suscríbete
Elecciones 2023 Elecciones 2023 mobile

Un mensaje nuevo y esperanzador

Votamos por el cuchito, de quien esperamos un cambio total de procedimientos.

En Cúcuta estamos viviendo muchas cosas nuevas e interesantes situaciones. 

La más reciente es la que esta encarnando Jairo Yáñez Rodríguez, una persona del común, un viejito chévere, berraco y trabajador. 

Siempre lo he conocido descomplicado  y echado  palante, que no se amilana ante las adversidades y que muy poco se le ve con cara de perro. 

Desde que dirigió Cerámica Andina, todos sabían que era el creativo, el inquieto, quien estaba en la jugada siempre pensando en innovar, crear. 

Dios no permita que se le suban los humos, sabiendo que quedó en deuda con 110.462 votos y más de 700.000 habitantes que necesitan recobrar el sentimiento de pertenencia por esta gran ciudad que lo acogió desde hace muchos años, sin querer queriendo, y rompiendo paradigmas, se acaba de alzar con la próxima Alcaldía de Cúcuta a partir del año entrante. 

Yo creo que ni él se lo imaginaba, habida cuenta de las prácticas inveteradas en nuestras ciudades (los altos cargos se consiguen con mucha plata, maquinaria y algunas trampas). 

Como innovador que es, se lanzó a hacer algo diferente, únicamente con la ayuda de un megáfono y de algunos muchachos que le ayudaron, se postuló como candidato a la Alcaldía... y lo logró,  con solo tres meses de trabajo de campo exponiendo su sentir y sus ideas en la vía pública. 

Y así se fue ganando la atención,  la buena imagen de la gente, y la motivación de los medios masivos de comunicación, quienes se unieron  con disimulo a la causa innovadora para alcanzar la meta de la Alcaldía. 

Muchos entendimos que era una buena oportunidad para salir de lo mismo, de esa politiquería corrupta que nos tiene cansados a la mayoría de los que habitamos la Perla del Norte y votamos por el cuchito, de quien esperamos un cambio total de procedimientos, toda vez que su discurso y actitudes deben ser coherentes con su proceder diario durante los 4 años que durará  el tiempo de su mandato, para que además sirva de motivación positiva a nuevos hombres y mujeres buenos, sanos y capaces que están en esta línea de la honestidad, se lancen sin miedo como candidatos a próximos períodos de elecciones.  

Con esta aventura de Jairo Yáñez, vale la pena aprender que para ejecutar cualquier idea, deseo o locura, lo más importante es atreverse a dar los pasos necesarios, incluso sin pedirle permiso a nadie. Por todo ello, y comprendiendo que él no es un político veterano, debemos apoyarlo  y tenerle paciencia.    

Desde esta Columna de Opinión le deseamos serenidad y éxitos.

Domingo, 3 de Noviembre de 2019
Premium-home
Patrocinado por:
Logo Empresas
Temas del Día