La Opinión
Suscríbete
Elecciones 2023 Elecciones 2023 mobile
Columnistas
Vivir así no es chistoso
El estrés es el primer ministro del gabinete gubernamental en el principado del mundo.
Jueves, 15 de Noviembre de 2018

Con tanto entretenimiento y jugando a la parafernalia de la vida, conviviendo con la vanidad del reconocimiento y los colores del mundo mediático, es muy fácil dejarse atrapar por nuestro enemigo principal, ese que actúa de forma silenciosa y que sigilosamente arrebata nuestra conciencia y nos tiende una red de confusiones. Ese que tiene nombre propio y que no funciona solo, sino con sus aliados. Son cinco «superenemigos». Conózcalos de frente porque usted convive con ellos y no los ve. 

Se los presento. Ellos son: la angustia, la preocupación, la ansiedad y la prisa, obedeciendo todos a su majestad el estrés. 

Todos ellos están gobernados por el rey Ego, que celebra cuando la persona se declara «en depresión» y cuya victoria es muchas veces nuestra propia vida. Estos cinco enemigos funcionan reprimiendo el sistema inmunológico, ahogando nuestras células y generando un foco de debilidad que el cuerpo al final no logra controlar, porque nosotros, con el afán de atender las necesidades del ego y las exigencias de cada día, lo sobrecargamos sin limitaciones. 

Cuando nos vemos en un centro médico recibiendo un diagnóstico de colon inflamado, gastritis, cálculo renal, migraña, intensos dolores de cabeza, insomnio, impotencia, infarto, cáncer o, como en mi caso, un derrame cerebral, entonces entendemos que el estrés nos está ganando la batalla, y que todo eso que perseguimos para atender las exigencias del mundo, todas esas ilusiones, anhelos y deseos que construimos para un futuro que no será se extinguen por cuenta de la falta de conciencia. A mí me correspondió la autopista mediática, donde hay que andar muy rápido para estar siempre en el top 10 del reconocimiento y de las calificaciones que ofrecen los estudios de sintonía. A otros les corresponde la carretera destapada de la política, con sus trampas y vacíos. A algunos la vía de la ciencia, con compromisos avanzados de constantes estudios y actualizaciones. Y a muchos les toca la autopista alterna; la de los negocios, la administración, la economía, la industria, las ventas, etc. Permítanme contarles que todas las anteriores son plataformas de alta velocidad, en las que todo se mide por resultados y donde los carros fantasmas de la angustia, la preocupación, la ansiedad, la prisa y el estrés se nos vienen encima y nos obligan a acelerar el paso hasta hacernos perder el control. 

Eso deja una vida a la carrera y con afanes. Eso era lo que yo estaba dejando en una sala de cuidados intensivos. Dejaba mi vida y a mis hijos sin su padre, que corría en todas direcciones sin disfrutar la vida y perdiendo su sonrisa por el resto de sus días.

En nuestra cotidianidad hemos decidido hablar de un constante corre-corre con el que nos jactamos de ser importantes. Necesitamos correr para cumplir, correr para resolver, correr para tomar decisiones y correr para triunfar. La prisa es ese tiempo infinito entre un problema y su solución que creemos, nos resolverá pronto un momento de angustia. 

Numerosos estudios arrojan como resultado que la prisa, la preocupacion, la ansieda y la angustia producen estrés; ese enemigo silencioso que destruye el equilibrio inmunológico del cuerpo y que nos expone a numerosas enfermedades, principalmente cardiovasculares.

El estrés es el primer ministro del gabinete gubernamental en el principado del mundo donde reinan la burocracia de pensamientos y las exigencias de la sociedad. 

El estrés es como el rey en el palacio de la depresión. Todos los demás sentimientos y emociones desempeñan el papel de sirvientes y funcionan a merced de su majestad, tendiéndoles trampas a sus visitantes con tentadoras propuestas en escenarios fascinantes que la vanidad no podría resistir. 

Cuando el individuo está atrapado en ese castillo, comienza a vivir el engaño de ilusiones que el rey Ego exige para garantizar su permanencia. 

El enemigo silencioso es tan audaz, que logra mimetizar ese holograma de fantasías con la felicidad pura. Y como caminantes sedientos que experimentamos visiones vamos andando día tras día hacia un oasis que nunca alcanzaremos porque hipnotizados seguiremos buscando nuestros reflejo en el supuesto pozo de la felicidad, donde caeremos profundamente. 


Luego, cuando despertamos con la abrupta y estrepitosa caída y buscamos la luz, aparecen entonces los guardianes de ese palacio que nos inventamos. 

Son los cinco dragones super enemigos que están allí, furiosos y amenazantes, arrojándonos fuego para intimidar nuestro coraje y llenar de dudas nuestra valentía, y finalmente pisotear nuestra dignidad cuando nos vemos derrotados con ganas de entregar nuestras vidas. Es una trampa. El estrés es una trampa mortal.Y su victoria es nuestra paz. 

El estrés se disfraza de circunstancia y su atuendo favorito es el de camaleón. Lo usa para confundirse entre los colores de la economía, las ramas de la sociedad, los caminos del éxito profesional, los nidos del poder y las luces del reconocimiento. El estrés no se deja ver. 

Solo aparece para cobrar la recompensa. Es cobarde y misterioso, no habla de frente y su principal herramienta es confundir a la persona, haciéndole creer que su esfuerzo será recompensado con medallas y la admiración de los demás. Todos sabemos que es difícil participar en el juego del mundo sin afectar la naturaleza de la paz interior con que nacemos, y que solo los grandes maestros espirituales, con profundos conocimientos y ejercicios de silencio, meditación, oración y reflexión, logran neutralizar este flagelo, renunciando al mismo tiempo a los supuestos beneficios de confort y reconocimiento que trae consigo el misterio terrenal. 

Mientras tomamos la decisión de crear conciencia y desprendernos de ataduras, creencias y condicionamientos para la felicidad pura, veamos qué tan cerca estamos de esta cruda realidad que nos amenaza con mensajes cotidianos como esos sintomas que se manifiestan en nuestro cuerpo, la casa de nuestra alma.

Como ves; por todo lo anterior es que digo que “vivir así, no es chistoso”.Toma acción, enciende la luz de la conciencia y derrota a esos super enemigos en estos verdaderos super amigos: La Calma, la Paz Interior, El Equilibrio, la Paciencia y la Fe.

Hakuna Matata JMC

Temas del Día