Están dando en canales de cine pagos el documental sobre la estadía hasta su muerte en España, del comando SS alemán Otto Skorzeny, el liberador de Mussolini después de la captura de los aliados, y nazi raizal.
Pero lo más interesante del documental es que explican cómo funcionaba la llamada Ruta de las Ratas, la evacuación hacia América Latina desde puertos españoles de nazis buscados para ser juzgados. Es sabido que Francisco Franco era un declarado fascista y que España tanto en la guerra como en la posguerra fue refugio de fascistas.
Y lo segundo que se desprende del documental es por qué los aliados permitieron esto en la posguerra, si tenían todas las herramientas políticas y militares para impedirlo. Respuesta: la guerra fría.
Pero empecemos por lo primero, ¿por qué el cono sur fue refugio de fascistas? Fácil: porque personajes como Juan Domingo Perón y Alfredo Stroessner eran fascistas, aunque el primero tenía un discurso socialistoide. Lo que hay que entender es que fascismo y comunismo, enemigos declarados, comparten muchas características. Ambos ismos crean regímenes autocráticos de partido único y controlan la sociedad por métodos policiacos. El fascismo tiene su base ideológica en el nacionalismo y el racismo, mientras que el comunismo la tiene en un internacionalismo de luchas de clases y ambos ismos consideran la violencia como ejercicio político válido para llegar al poder: más específicamente, consideran tener derecho a todas las formas de lucha. En el fascismo y en el comunismo no hay ciudadanos sino súbditos y quien se oponga al regimen se “desaparece”. Usan la democracia liberal para llegar al poder como Hitler y Chávez, y una vez allí eliminan la eliminan pues la cual consideran ideológicamente corrupta y débil, y empiezan a hacer “elecciones” controladas. Se diferencian en que el fascismo permite la propiedad privada y la economía de mercado “bajo sus leyes”, es decir, oficializando la corrupción estatal. El comunismo, en cambio, elimina el mercado y todo lo maneja el líder: la corrupción máxima. En ese sentido, Perón era más fascista que comunista, y el justicialismo argentino que destrozó el país es de base fascista, aunque se diga progresista. Por eso hay que mirar bien el género del progresista, para saber si es de corte fascista o comunista. Y a los demócratas liberales los mamertos les dicen fachos; eso es lo que pasa cuando no solo se es radical sino también ignorante. La ruta de las ratas era una ruta fascista. Por eso no es raro que varios nazis puros como Ernst Röehm y Joseph Goebbels vinieran del socialismo alemán, ni que fascistas alemanes hubieran ayudado a crear la Alemania Comunista, paradójicamente llamada Democrática.
La guerra fría que empezó apenas al terminar la segunda guerra mundial lo alteró todo. Para los aliados, en particular para los estadounidenses, había que superar muy rápidamente el tema nazi y enfrentar el poder soviético. Y para eso hizo muchas concepciones como aceptar dejar impunes los crímenes de los fascistas austriacos y noruegos (¿será por eso qué el comité Nobel protege tanto a los victimarios?), o dejar a Franco en el poder si colaboraba contra los soviets. Es más, el documental añade que Skorzeny no fue tocado porque actuaba como espía para la OSS (la pre-CIA) y para el Mossad, el servicio secreto israelí (judío), ayudando a neutralizar al nacionalista-socialista-antisemita Nasser. El velo negro que cubrió los crímenes nazis en la guerra fría provino de ella, pero, nada hay oculto bajo el sol con el tiempo apropiado, y por eso ese velo se ha venido corriendo lentamente.
Todavía hay excusas para poner velos negros a crímenes de lesa humanidad, como hicimos en Colombia con las farc; solo que la ruta colombiana de las ratas sacó a las narcoguerrillas de las selvas colombianas y de Venezuela, pero no para esconderlos, sino para que ellos vinieran a juzgar. Las ratas se volvieron jueces y los jueces se volvieron ratas.
Interesante documental.
