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Cúcuta Deportivo
El trasegar de Edwin del Castillo en el fútbol
El exjugador de 36 años vistió en distintos períodos la camiseta del Cúcuta Deportivo.
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Sábado, 9 de Mayo de 2020

Vestir la camiseta del equipo de su región y más si se les es hincha, es uno de los anhelos más grandes de los jugadores profesionales de fútbol. Ese deseo fue cumplido por el cucuteño Edwin Del Castillo, quien en distintos periodos vistió la camiseta del Cúcuta Deportivo. 

Su historia con el deporte rey y con el equipo de los nortesantandereanos inició a principios del Siglo XXI. Su tenacidad y técnica futbolística lo llevaron a ser parte del rojinegro en el 2002, que para la época estaba en segunda división y era dirigido por Moisés Pachón. 

Para esos años, en el Fútbol Profesional Colombiano (FPC) era obligatorio que los oncenos tuvieran  en su titularidad a dos menores. Fue así como Del Castillo empezó a entrar en varios encuentros junto a Alejandro Rondón, quienes eran sustituidos en menos de un minuto.

En sí, entraba al terreno de juego y no tenía posibilidad de tocar el balón. Según el defensor, su debut con minutos fue en un partido contra Centauros en Villavicencio luego de que Alexis Gamero tuviera un fuerte choque al inicio del juego y le tocara salir sustituido. 

“Recuerdo ese partido con mucho nerviosismo. Temía cometer un error porque en esos momentos los reproches eran muy fuertes”, dijo el defensor que para ese momento tenía solo 16 años. 

Después de su debut en tierras llaneras, jugó algunos encuentros más durante el segundo semestre de ese 2002 y el primero de 2003 hasta que el presidente del Cúcuta, Efraín Pachón, decidiera llevarlo a probar a Independiente de Argentina. 

“Me probé quince días con el director técnico Oscar Ruggeri quien decidió dejarme. Ahí estuve seis meses pero no jugué con el plantel profesional. Entrenaba con ellos pero disputaba partidos del torneo de reserva”, recordó el cucuteño. 

Luego de su paso por tierras gauchas en la que tuvo la oportunidad de jugar con Sergio ‘Kun’ Agüero, Del Castillo volvería al rojinegro en 2004 para hacer parte del equipo de Eduardo Retat, a quien se le vio truncada la posibilidad de disputar la final del ascenso tras el amaño entre Valledupar y Real Cartagena. 

“En el segundo semestre del 2004 hicimos muy buenas cosas futbolísticas. Retat le dio un muy buen manejo al grupo. En el partido que nos daba el paso a la final se lo ganamos a Alianza Petrolera pero debíamos esperar un resultado del partido en Valledupar. En los últimos tres o cuatro minutos, hubo un silencio extraño en el estadio. Estábamos con la incertidumbre y cuando nos enteramos de que el Real Cartagena había hecho cuatro goles en cinco minutos quedamos con la frustración y el sin sabor de no poder luchar por el ascenso”, contó. 

Tras ese decepcionante hecho del fútbol colombiano, Del Castillo cerraría el 2014 con una lesión en una de sus rodillas. Para el 2005, no pudo estar en el plantel que logró el ascenso pues su recuperación le impidió jugar ese año. 

En 2006, fue cedido a Millonarios del estratega Juan Carlos Osorio, equipo en el que tampoco pudo jugar pero del cual obtuvo gran aprendizaje al compartir con jugadores como Juan Carlos Henao, Ricardo Ciciliano, Orlando ‘El Fanstasma’ Ballesteros, Jairo ‘El Tigre’ Castillo y Gerardo Bedoya, entre otros. 

La inactividad por dos años lo llevaron a buscar otro fútbol y fue así como en 2007 llega a Llaneros de Guanare de Venezuela. Allí pudo volver a tener continuidad con un fútbol que él define como de “mucho roce y temperamento”. 

“En mi memoria queda un partido que tuvimos con Caracas en su casa. El estadio de fútbol quedaba junto al de béisbol y ese día coincidió en que jugaba al mismo tiempo Leones (el equipo local). Mientras que el estadio de béisbol estaba a reventar el de nosotros tenía 50 personas y ellas estaban más pendientes del otro partido que del de fútbol”, recordó. 

Su paso por Venezuela no fue más que de un año ya que el profesor Jorge Luis Bernal lo llamara para integrar el Cúcuta Deportivo 2008. Tras la salida de Bernal del rojiinegro, Pedro Sarmiento tomaría las riendas pero no tuvo momentos para jugar sino hasta que Aní bal ‘El Maño’ Ruíz asumiera la dirección técnica, quien le dio algunos partidos. 

“De ese 2008 me queda haber compartido con grandes jugadores como Macnelly Torres, Lin Carlos Henry, el boliviano Diego Cabrera y el argentino Matías ‘El Pescadito’ Urbano”, subrayó el exdefensor central.

El recién ascendido Real Cartagena fue su equipo para el 2009. Allí, según contó Del Castillo, disputó un aproximado del 60 % de los partidos en un plantel que era dirigido por Hubert Bodhert. 

Con una buena presentación en el 2009, Jorge ‘El Patrón’ Bermúdez, director técnico del América de Cali para la época, lo llamó para hacer parte del plantel 2010, oportunidad que Del Castillo no desaprovechó y terminó firmando por dos años.

Su paso por el conjunto escarlata fue un cambio importante para su carrera pues llegaba a uno de los equipos más grandes del país. 

“Fue un cambio brusco. Llegué a una plaza con una hinchada muy apasionada que exige mucho”, cuenta el defensor que en su paso por el América marcó en un clásico disputado el 12 de septiembre de 2010 (ganado 2-1 por el Deportivo Cali) y vivió el descenso del 2011. 

“Aún recuerdo un partido contra el Tolima que teníamos que ganar para clasificar en un duelo que se jugaba sin público. Me equivoqué dos veces y nos marcaron. Empecé a recibir amenazas pero nada fuera del contexto de la pasión. Es una hinchada exigente”, afirmó Del Castillo. 

Tras vivir el primer descenso con el conjunto americano, el defensor volvería al equipo que le dio la oportunidad de debutar. 

Mi regreso al Cúcuta Deportivo se da en el 2012 tras un llamado del argentino Oscar Héctor Quintabani. Él fue el director técnico que me llenó de confianza para empezar a jugar de volante de marca”, recordó el cucuteño. 

Para ese momento, el rojinegro debía luchar por no descender. Luego de un primer semestre aceptable partiría con el club para la Yopal, ciudad que acogió al rojinegro mientras el General Santander era remodelado para los Juegos Nacionales de 2013.

“El viaje a Yopal fue traumático porque tuvimos la maleta lista como tres veces para irnos a la capital de Casanare pero siempre estuvo supeditada porque nos adeudaban. Pero al estar allá tuvimos muchas ventajas al ser una ciudad pequeña. Salíamos de entrenar y compartíamos muchos momentos. Fue una unión de grupo muy buena”, contó Del Castillo que tenía como compañeros  a Juan Camilo Angulo, Edwin Rivas, Mauricio Duarte, Jairo ‘El Viejo’ Patiño, Mauricio Duarte, Mateo Figoli y Henry Hernández, entre otros. 

Para el exjugador de 36 años ese año quedó en su recuerdo por un gol que le marcó al Real Cartagena permitiéndole al Cúcuta escapársele de la tabla del descenso y jugar la promoción. 

Su exequipo, América, fue el rival de ese encuentro en el que llegó el director técnico Guillermo Sanguinetti tras la renuncia de Quintabani. 

El resultado no pudo ser mejor para el motilón pues en su visita a Cali ganó 4-1. “No pude jugar en el partido de ida por suspensión pero en el de vuelta si actué. Logramos mantener la categoría a pesar del cambio de técnico, la ansiedad y el nerviosismo de un partido de esa clase”, dijo Del Castillo.

La temporada del 2013 no perdonaría al Cúcuta Deportivo. A pesar que para el segundo semestre se salvó el descenso directo en la última jornada, la promoción esta vez no estuvo del lado de los rojinegros. 

“Esa campaña estuvo cargada de problemas económicos en la institución. Para el segundo semestre ya se veían los atrasos en los pagos y a pesar de eso, el equipo no descendió directamente. En los últimos partidos ganamos encuentros difíciles como a Santa Fe en Cúcuta y a Nacional el Medellín”, contó el jugador que era utilizado como volante de marca o defensa central. 

En la promoción el Cúcuta Deportivo enfrentaría a Fortaleza. En el partido de ida jugado en Bogotá, los dirigidos por Julio González Montemurro perdieron 2-0. 

“En el duelo de vuelta José Augusto Cadena ya era propietario del equipo. Minutos antes de iniciar el encuentro nos canceló lo adeudado. Ese partido lo comenzamos ganando con un gol de Mauricio Duarte al minuto dos y pensamos que iba para largo pero no se pudo y lastimosamente descendimos”, confesó.

Su carrera terminaría en un 31 de julio 2014 en el duelo que empataron a un gol Cúcuta Deportivo y Alianza Petrolera por la Copa Colombia.  “Sufrí un golpe en la rodilla y ahí empezaron más lesiones. El médico me informó que lo mejor era que dejara de jugar al fútbol profesional y tuve que aceptar mi retiro a los 30 años”, dijo Del Castillo quien tenía aspiraciones de jugar por lo menos cuatro años más. 

“No fue fácil despertar de un día para otro y saber que ya no iba a jugar”, aseguró. 

Luego de saber que ya no podía jugar, el club le rescindió su contrato obligándolo a entrar en una disputa legal en la que el exjugador interpuso una tutela la cual salió a su favor siendo reintegrado al club. 

“Entro como director técnico de la Sub-15 y hasta el 2018 estuve en ese puesto ya que para el 2019 asumí la Sub-20 B”, contó el también profesional en derecho. 

Gustavo Contreras S. | gustavo.contreras@laopinion.com.co

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