La presión de los vendedores ilegales de combustible terminó en la liberación de su compañero.
El intento de captura de un vendedor de gasolina de contrabando en inmediaciones de la cárcel Modelo de Cúcuta desató este lunes una revolución entre seis pimpineros.
Los vendedores ilegales de combustible atacaron a la Policía, mientras esta se defendió con bombas lacrimógenas.
Sin embargo, la autoridad cedió a las pedradas del minúsculo grupo y liberó al hombre, minutos después.