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Basura de Bucaramanga y Floridablanca sería trasladada a Cúcuta

Ante la orden de cierre del relleno sanitario, cuatro municipios afectados por la medida analizan planes de contingencia.

A partir este viernes se iniciaron las labores necesarias para cerrar de forma definitiva El Carrasco y poner fin a las actividades de relleno sanitario en este lugar. Así lo ordenó el Juez 15 Administrativo de Bucaramanga, Edward Avendaño.

Sin embargo, los 17 municipios de Santander que disponen sus basuras en El Carrasco podrán seguir llevándolas a dicho sitio, por un lapso que aún está por establecerse. La Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (Anla), será la entidad encargada de establecer dicho plazo, conforme a lo ordenado en la audiencia por el juez.

La Corporación para la Defensa de la Meseta (CDM), y el Área Metropolitana de Bucaramanga, (AMB) apoyarán el análisis técnico y también ayudarán a definir por cuánto tiempo se permitirá la entrada de basuras a El Carrasco.

“Este juzgado está presto a advertir, a conminar, pero sobre todo a hacer cumplir la sentencia que ordenó el cierre de El Carrasco y que lleva siete años y cuatro meses sin ningún cumplimiento”, dejó claro el juez.

Avendaño les ordenó a las tres autoridades ambientales previamente referidas, que el próximo 8 de febrero le presenten un informe técnico en el que argumenten y den a conocer hasta qué fecha se aceptaría el ingreso de desechos en El Carrasco.

“Primer plan de desmantelamiento”

El jefe de Gobernanza de la Alcaldía de Bucaramanga, Manuel Azuero, le entregó un parte de tranquilidad a la comunidad, que a lo largo de hace más de 20 años está esperando el cierre definitivo de El Carrasco.

“Por primera vez en la historia de El Carrasco se ha presentado un plan de desmantelamiento y cierre del relleno sanitario. Se seguirán disponiendo basuras, pero solo por un corto plazo que definirá la Anla con un acto administrativo”.

El funcionario también informó que “adicionalmente el juez estableció la creación de una mesa de trabajo permanente para encontrar un nuevo sitio de disposición final”.

‘Plan B’ de los municipios

Es importante informar que, de llegarse a impedir el ingreso de basuras a El Carrasco sin tener adecuado otro sitio de disposición final cerca al área metropolitana de Bucaramanga, los cuatro municipios ya cuentan con planes de contingencia para trasladar los residuos a otras ciudades.

La Alcaldía de Bucaramanga ha indicado que su alternativa es llevar las basuras hasta Cúcuta o Medellín, con un incremento en la tarifa cercano al 40%.

El Alcalde de Floridablanca ha manifestado que trasladaría las basuras hasta Aguachica, Barrancabermeja o Cúcuta, y que previamente las compactaría con el propósito de hacer la menor cantidad de viajes posible. “El impacto sería mínimo en la tarifa de los florideños”, asegura.

Girón, a través de su mandatario, ha manifestado que ya cuenta con los acercamientos necesarios para disponer los residuos sólidos en Aguachica (Cesar) o en Cimitarra (Santander).

La Alcaldía de Piedecuesta ha informado que sus alternativas de disposición final son Aguachica y Barrancabermeja.

¿Por qué no se llevará más basura a El Carrasco?

Conforme con lo explicado por los geólogos e ingenieros que asesoran el proceso de cierre de El Carrasco, para hacer su clausura de forma segura es preciso iniciar una serie de obras y trabajos que contemplan diversas etapas.

A grandes rasgos, se necesita garantizar la estabilidad de los diferentes taludes que existen dentro de dicho sitio de disposición final, al igual que de todas sus cárcavas y celdas. Se busca evitar nuevos deslizamientos de tierra y de residuos como el ocurrido en la emergencia del pasado 3 de octubre.

“El cierre de El Carrasco no es como cerrar una alcoba. Es algo muy complejo. Hay que hacer la estabilización de las celdas usadas, y esto implica que se sigan disponiendo residuos allí, con efectos de garantizar dicha estabilidad. En el plan presentado las hemos denominado celdas de respaldo”, indicó Manuel Azuero.

Para cerrar El Carrasco se requiere ejecutar labores para el adecuado control de las aguas de escorrentía y lluvia, con el fin de evitar que estas se mezclen y se contaminen con las basuras. También es necesario asegurar la conducción de lixiviados (líquidos putrefactos de la basura), y el trata miento de gases.

Estas tareas son fundamentales para prevenir una posible contaminación del ambiente, ya que aunque se deje de disponer basuras en El Carrasco, tales líquidos y gases seguirán emanando de los residuos que desde hace varias décadas se disponen allí.

Cerrar definitivamente El Carrasco y clausurar de forma controlada y segura sus diferentes celdas, tendría un costo estimado de $150 mil millones. Tal dinero se invertiría a lo largo de dos décadas, que sería el tiempo que tomarían las labores de saneamiento y recuperación ambiental.

Los $150 mil millones es una cifra aproximada y preliminar, pero se invertirían durante el transcurso de los próximos 20 años. Con ello se tratarían todos los pasivos ambientales que ha acumulado El Carrasco, a lo largo de sus más de 40 años de operación.

La otra orden que dio el Juez 15, es que entre las cuatro alcaldías del área metropolitana se analice y se determine cuáles serían las fuentes de financiación para cubrir los costos del pasivo ambiental en El Carrasco.

Vanguardia Liberal

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Colprensa
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Sábado, 2 de Febrero de 2019
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