El descuido que prevaleció en el control de las epidemias de chikungunya y zika en Cúcuta y el área metropolitana no solo desnudó la fragilidad de las autoridades de salud para enfrentar ambos virus, sino que se expuso a la población a enfermedades con consecuencias de gran impacto, como el síndrome de Guillain Barré y la microcefalia, hasta ahora relacionadas con el zika.
El solo hecho de haber figurado entre las tres primeras capitales del país con el mayor número de casos confirmados (27.000 en chikungunya y 10.348 en zika), impuso también retos a las autoridades para estar mejor preparadas para la llegada de nuevos virus, como el mayaro, también producido por la picadura del zancudo Aedes aegypti.
El mayaro llegó a América pero con muy baja incidencia. La enfermedad que causa se parece al chikungunya por las consecuencias articulares.
En Cúcuta, según lo admitieron las autoridades de salud del momento, la epidemia de chikungunya, tomó a la ciudad ‘con los pantalones abajo’.
Parecido ocurrió con el zika en las primeras semanas de su aparición (noviembre-diciembre de 2015), cuando la administración local iba de salida.
La pregunta que se hacen los ciudadanos es qué tanto aprendieron la lección las autoridades para estar mejor preparadas ante la llegada de un nuevo virus, en momentos en que el Ministerio de Salud declaró el cierre epidemiológico del zika.
La secretaria de Salud del municipio, Judith Ortega, mencionó que así se haya cerrado la epidemia generada por este virus, en el municipio todos los controles y la vigilancia que se activaron en enero de 2016 se mantienen vigentes, “ahora más que nunca, porque la misión es no bajar la guardia en la erradicación de los criaderos del mosquito transmisor”.
Aunque del virus mayaro no se tiene de momento ningún caso reportado en la ciudad, la funcionaria recalcó que con la red prestadora de salud se continúa ejerciendo la promoción, prevención y la vigilancia en todos los niveles. “Sin embargo, es claro señalar que el control no solo es responsabilidad de las autoridades, también es de las comunidades y en eso estamos insistiendo en cuanto tiene que ver con la erradicación de los inservibles en donde se reproduce el zancudo Aedes Aegypti.
Como entidad territorial, el Instituto Departamental de Salud seguirá adelantando acciones de control y llamando la atención de la comunidad para que reconozca la importancia de mantener los patios de las casa libres de elementos inservibles como llantas, botellas y potes que pueden ser criaderos, insistió por su parte el director del Instituto Departamental de Salud (Ids), Juan Alberto Bitar.
“Continuaremos con jornadas de recolección de inservibles en los municipios, enseñando a las comunidades la importancia de lavar semanalmente los tanques y mantenerlos tapados”, dijo Bitar.
La Opinión
