Al ingeniero con el que la alcaldía suscribió el pasado 10 de julio un contrato por $4.750 millones para hacer los estudios del Plan de Ordenamiento Territorial (POT) que regirá los destinos de Cúcuta para los próximos 12 años, no le pagan un contrato de $689 millones que terminó de ejecutar este año con la EIS Cúcuta, debido a las inconsistencias que encontró la interventoría.

Se trata de Rubén Belloso, quien apareció a último momento con una propuesta en Planeación municipal para asumir los estudios de la carta de navegación de Cúcuta, luego de que el mismo contrato le fuera liquidado el pasado 8 de junio a la unión temporal Suárez y Cruz Urbano S.A, tras un control de advertencia que presentó la Procuraduría Provincial señalándole al secretario de ese despacho, Orlando Joves, que en dicha firma figuraba  Eimy Suárez, hija de la actual secretaria de Posconflicto del municipio, Omaira González Vera (y del condenado exalcalde Ramiro Suárez), por cuanto se configuraba una inhabilidad.

Según se dice en los corrillos de la alcaldía de Cúcuta, el nuevo elegido para llevar a cabo el POT de la capital nortesantandereana, también es conocido de vieja data del exalcalde Suárez y asiduo contratista de la alcaldía de Cúcuta. Entre otros contratos firmados figuran el de la adecuación de la nuevas oficinas de Tránsito municipal, el cual se inició a comienzos de 2016 con escándalo, porque  emprendieron obras sin haberse firmado ningún documento, así como la remodelación del Cementerio Central.

El último contrato que suscribió Belloso antes de que le adjudicaran el del  POT, fue con la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Cúcuta (EIS Cúcuta), el pasado 15 de diciembre, para construir el colector Yabos-Las Delicias-Ciudadela de Las Flores-Anillo Vial, el mismo por el que no ha podido cobrar un peso, debido a las inconsistencias encontradas por la interventoría.

“Surgieron muchas discrepancias entre Belloso y la firma interventora Sudamerican proyectos de ingeniería Ltda. En este caso particular, el señor contratista no cobró un peso (a lo largo de la ejecución del contrato), no entendemos por qué”, dijo Gustavo Cárdenas, gerente de la EIS Cúcuta.

Agregó que a la hora de levantar el acta final para la entrega de la obra, “había unos desacuerdos (entre las partes) por una cantidad grande de dinero y de obras no ejecutadas”. Según conoció La Opinión, Belloso procedió a presentar una cuenta de cobro a la EIS para el desembolso de los cerca de 700 millones de pesos, pero la misma no iba firmada por el representante legal de la  interventoría (Héctor Jesús Torres), por lo que no le fue pagada. “En este caso, la interventoría es autónoma”, dijo Cárdenas.

En el contrato del POT, Belloso cuenta con un porcentaje del 80 por ciento, y el otro 20% es de la firma que lo acompaña en la unión temporal Asesoría e interventoría empresarial especializada SAS.

Por los alcances de este contrato y por lo que representa para la ciudad, fue que los representantes de los gremios de Cúcuta expresaron días atrás que conformarán una veeduría para vigilar de cerca el desarrollo del mismo.

La Opinión llamó a Belloso y a Torres insistentemente a sus teléfonos  para conocer su opinión sobre el contrato de la EIS, pero al cierre de esta edición no se tuvo ninguna respuesta de ambos.

Habla Planeación

El secretario de Planeación Municipal, Orlando Joves, indicó que el contrato que le fue adjudicado a Rubén Belloso para la elaboración del Plan de Ordenamiento Territorial (POT), se produjo dentro de la ley.

“Se hizo la convocatoria y se presentaron dos firmas, la de Belloso (Unión Temporal Planeando a Cúcuta) y la empresa de servicios profesionales integrales y asesorías Cazasan SAS.

“La idea era que llegaran las mejores propuestas y firmas con experiencia”, dijo el funcionario, al tiempo que lamentó que en Cúcuta se estigmatice a todo aquel que gana un contrato en la alcaldía. “Esos que estigmatizan, nunca presentan propuestas”, acotó.

“En el caso del POT, apenas estamos empezando a construirlo y ya lo quieren destruir”, señaló Joves, al precisar que Belloso debe producir un documento socializado y concertado con las fuerzas vivas de la ciudad.