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Cúcuta
De México traen conocimiento para los migrantes
La experiencia resultó de gran valía para los planes que tiene la universidad en Cúcuta.
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Martes, 6 de Marzo de 2018

Lo que más impactó a los profesores de la Universidad Francisco de Paula Santander en su visita a los albergues scalabrinianos de México, en fronteras con Guatemala y Estados Unidos, fue el hecho de que ninguno de los migrantes que entraban a ellos salía sin haber aprendido un arte.

Ellos fueron invitados por la comunidad Scalabriniana para que conocieran de primera mano el trabajo que se lleva a cabo en dichos albergues, con el propósito de que dicho conocimiento sea replicado por la academia en Cúcuta con los migrantes venezolanos.

Zulay Alarcón Rivera, directora de administración de empresas; Jhon Antuny Pabón León, jefe de la división de posgrados; Nelson Emilio García Torres, coordinador de la oficina de relaciones internacionales e Interinstitucionales, y Martha Sofía Orjuela Abril, docente del programa, fueron quienes aceptaron la invitación.

Alarcón manifestó que la experiencia resultó de gran valía para los planes que tiene la universidad en Cúcuta. “La comunidad scalabriniana hace énfasis en la generación de empleo como su principal apuesta, vamos ya estamos poniendo en práctica con las comunidades de venezolanos que están asentadas en las comunas 6 y 7 de Atalaya”, subrayó la catedrática.

Los dos albergues visitados están en Tapachula (frontera con Guatemala) y Tijuana (frontera con Estados Unidos), en los que se reciben a diario miles de migrantes.

En estos lugares, a los migrantes les otorgan además de hospedaje y alimentación, acciones en favor de la preparación técnica y generación de empleo, insumos que impactan enormemente en las capacidades humanas de quienes buscan una vida mejor, dijo Alarcón.

“El plan de trabajo es acompañar a la casa migrante, hacer ese acompañamiento a las unidades productivas y a los talleres que van a empezar a funcionar para que esos migrantes que llegan de Venezuela tengan un aprendizaje y no salgan de estos lugares sin nada, que pasen por los talleres y se formen en alguna labor que les pueda generar un empleo o una iniciativa de emprendimiento”, comentó la directora de Administración de Empresas.

El trabajo en Cúcuta

El trabajo que adelanta la Universidad Francisco de Paula Santander en las comunas 6 y 7 comenzó con un diagnóstico que culminó con la conformación de 8 unidades productivas, unas de cinco y otras de 10 migrantes, en áreas de confecciones, artesanías y preparación de alimentos.

Este trabajo se complementó en la parte sicosocial con la agencia de cooperación alemana GIZ.

Con los conocimientos adquiridos en México, la idea es los integrantes de las unidades productivas puedan establecer un plan de negocio que les permita, una vez abandonen el albergue, tener oportunidades de empleo o, en su defecto, abrir su propio negocio”, dijo Alarcón.

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