Las lluvias en Cúcuta y el departamento no cesan y cada día crece el número de familias afectadas por los daños que han generado las remociones de masas, colapsos de estructuras, derrumbes, desbordamientos, inundaciones y afectaciones de las redes eléctricas y de acueducto.
Ayer en el barrio Alfonso López, en la Comuna 10, las autoridades reportaron el colapso de dos estructuras en eventos que ocurrieron durante la mañana.
En la calle 28B con avenida14A, se vino abajo una vivienda construida en bahareque, donde vivía Jesús Manuel Cruz con su esposa, su hijastra de 12 años y su hijo, un bebé de nueve meses de nacido.
“Ellas dicen que sintieron un movimiento en la casa y apenas alcanzaron a agarrar el niño y salieron corriendo. Ahí perdimos todo porque no dio tiempo de nada. Yo estaba trabajando cuando me llamaron. Ella dice que traqueó y en seguida se vino abajo la casa entera, eso fue en segundos”, contó.
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En el mismo barrio, pero en la avenida 16 con calle 24-50, cedió parte de una estructura que colinda con la urbanización Los Naranjos, cuando una pared de la urbanización cedió por un proceso de remoción de masa.
Claudia Rodríguez, propietaria de la casa, contó que llovía desde la madrugada, pero a las 7:20 de la mañana sintieron un fuerte estruendo y cuando salieron, la parte de la cocina se había ido abajo.
“Se me fueron todos mis enseres, la cocina, lavadora, todo lo que tenía ahí. Yo digo que eso fue parte del condominio cuando lo arreglaron porque las máquinas que metieron debilitaron el terreno. Incluso ellos habían venido a mirar porque sabían que esto se iba a caer”, relató.
Con los pupitres en el agua
Uno de los centros educativos afectados por las lluvias de ayer fue la Institución Educativa Juana Rangel de Cuellar, en el barrio La Laguna de la Ciudadela Juan Atalaya. El fuerte aguacero hizo que amanecieran con los pupitres y parte del mobiliario en el agua.
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Yasid Alfonso Tarazona, técnico operativo del colegio, explicó que ayer tenían programada una feria empresarial que fue suspendida por las consecuencias que dejaron las lluvias. Aclaró que esta situación es recurrente siempre que se presentan los aguaceros por el colapso de un canal recolector de aguas lluvias que provienen de los barrios Ospina Pérez, Motilones, y parte de La Laguna.
“El canal no tiene la capacidad para albergar tanta cantidad de agua y al llenarse las tuberías, el agua que queda represada, se regresa y se viene por las alcantarillas que están en la institución. Ya cuando vemos que sale por las alcantarillas sabemos que se va a inundar”, comentó.
Tarazona aprovechó para hacer un llamado al gobierno municipal y departamental para que echen su mirada hacia esa institución porque cuando el agua ingresa tienen perdida de equipos de la sala de informática y otras herramientas electrónicas.
El censo
De acuerdo al último informe del Registro Único de Damnificados (RUD), hasta la fecha en Cúcuta van 728 familias damnificadas. El censo incluye a 60 barrios de nueves comunas que han sido golpeadas por la segunda temporada de precipitaciones.
La Secretaría de Gestión del Riesgo de Desastres Municipal reporta que otros eventos se han producido en la zona rural, donde además de pérdidas de cultivos, hay 35 instituciones educativas afectadas.
El último registro indica que en las últimas horas se presentaron en la ciudad caída de árboles, colapso de vías, procesos de remoción en masa, caída de rocas, represamiento de caudal y desbordamiento de drenajes y canales de aguas lluvias.
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Asimismo, informaron que se generaron desbordamientos de los ríos Zulia y Pamplonita, inundaciones en viviendas y colapso de muros estructurales.
El acueducto de la vereda Los Negros del corregimiento San Faustino y San Pedro se vio afectado, mientras que otros daños se generaron por inundaciones en instituciones educativas y colapso de distritos de riego.
Huber Plaza Villamizar, secretario de Gestión del Riesgo de Desastres Municipal, manifestó que dentro del Plan de Acción Especifico para la atención a la calamidad pública declarada, han realizado acciones de intervención en puntos críticos de drenajes naturales.
Habló de que mantienen las acciones para la mitigación del retroceso de las márgenes en el río Zulia, como la construcción de box culvert en el barrio Manuela Beltrán, manejo de aguas lluvias en el barrio San Miguel (parte alta) y el muro de contención en el barrio 28 de Febrero.
Emergencias en Ocaña
En Ocaña y zona del Catatumbo no son menores las consecuencias que han dejado las condiciones meteorológicas.
Agrietamiento de las paredes de las viviendas ubicadas en alto riesgo, desbordamiento de los riachuelos, avería a los puentes, caída de árboles, deterioro de las vías terciarias y desprendimiento de lodo y rocas han sido algunas consecuencias que ha dejado el crudo invierno.
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enemos un promedio de 300 personas damnificadas en Ocaña y hemos respondido con las ayudas humanitarias”, indicó el director de la Oficina de Gestión del Riesgo, Gustavo Adolfo Paba Navarro.
En los barrios los Fundadores y Simón Bolívar se han reubicado a 18 familias ante el inminente riesgo ocasionado por una falla geológica. “Afortunadamente, sólo se registran pérdidas materiales y ninguna persona ha resultado afectada”, agrega el funcionario.
Los alcaldes de la provincia de Ocaña y zona del Catatumbo manifestaron que ante la magnitud del problema los pocos recursos se agotaron para la recuperación de la malla vial que es la más afectada.
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