La Opinión
Suscríbete
Elecciones 2023 Elecciones 2023 mobile

Este es el barrio más pequeño de Cúcuta

Se llama Brisas del Sinaí, allí viven 44 familias.

Recorrer Brisas del Sinaí solo toma 10 minutos a pie, y eso, si se va hablando con un par de vecinos por el camino. Aquí todos se conocen, sin embargo, no son tan populares como otros barrios de la ciudad, tal vez porque están asentados como un parche entre La Esmeralda, Mujeres del Futuro y Betel.

Y es que los límites de Brisas del Sinaí, un barrio en el que su población no supera los 70 años, solo los tienen claros Planeación Municipal, el Instituto Geográfico Agustín Codazzi, y parte del vecindario.

No tienen cancha de fútbol ni salón comunal y mucho menos parques. Las 44 familias que ocupan los predios deben recrearse en los barrios vecinos. Quizás, esto hace que el sector  pase inadvertido para muchos.

Pasearse por el vecindario es el mejor plan del barrio. Hoy, dicen con orgullo que son el único barrio de Cúcuta que tiene todas sus calles pavimentadas y en muy buen estado.

Y es que, luego de invadir un predio privado por cuenta de la necesidad de tener una casa propia, estas familias han optado por transitar por la legalidad.

Recuerdan como si fuera ayer esos primeros días en los que sus ranchos competían con la maleza por sobresalir. Encontrar ese espacio para construir sus hogares inspiró el nombre que hoy lleva el barrio.

Brisas del Sinaí, según explican en el lugar, es una composición entre la fuerte brisa que hace en el sector y el lugar donde según la Biblia, Dios entregó a Moisés los Diez Mandamientos.

Pero más que por el tamaño, en Brisas del Sinaí quieren ser reconocidos por el empeño de su gente por alcanzar la legalidad.

Pequeños y legales 

Aunque hoy muchas de sus casas continúan en tablas, dicen que se pueden dar el lujo de decir que son de los pocos barrios de la ciudadela La Libertad que nació de una invasión y hoy tiene escrituras.

Todo, porque 15 días después de haber invadido el predio privado, los líderes encabezaron un comité de trabajo con un único fin: encontrar al dueño de los terrenos invadidos; tras indagar en la alcaldía y en el Igac, y en las notarías, encontraron al propietario del lote.

Pese a que tenían una orden de desalojo vigente, los líderes se contactaron con el dueño y tras insistirle durante un mes que les vendiera, este accedió.

“Nos pedían 12 millones por el lote y ofrecíamos 8, finalmente quedamos en 9 y como si fuera poco le pedimos un plazo de 8 meses para pagárselo”, recordó Ibáñez en medio de risas. “El señor entendió nuestras condiciones económicas y nos colaboró”. De inmediato los vecinos empezaron a gestionar ante la alcaldía su legalización.

La unión hace la fuerza

Las familias se ubicaron en lotes de 5 y 20 metros de frente por 15 metros de fondo, y se dejaron dos áreas para el salón comunal y un parque. Se quedaron con las ganas de la cancha de fútbol por la falta espacio.

“Ser pequeños también nos ayuda a que trabajemos mejor. Hemos podido escalar y conseguir lo que nos proponemos en poco tiempo. A los tres años de instalados ya teníamos redes de acueducto y alcantarillado, energía eléctrica y alumbrado público”, cuenta José de Jesús Ibáñez, líder del barrio.

Ganas de sobresalir 

Aunque no son más de 220 personas las que componen este barrio, todos se han dado a la tarea de que, como dice el dicho: ‘haya de todo como en botica’. En el barrio se pueden encontrar tiendas, variedades, papelerías y demás.

“Somos unidos, y aunque también tenemos nuestras peleas como cualquier vecino, nos arreglamos rápido porque lo único que queremos es que este barrio no solo sea noticia porque es pequeño, sino porque también tiene la capacidad de generar buenos proyectos para nosotros y los demás”, dice Ibáñez.

Agregan que todo no es color de rosa, pues para conseguir una ayuda estatal a veces la tienen más difícil que los demás porque “los políticos suman y no representamos muchos votos”; sin  embargo, esto prefieren dejarlo solo como una anécdota.

Cúcuta tiene alrededor de 250 barrios divididos en 10 comunas, de los cuales, según estadísticas de Planeación Municipal, el 55 por ciento ha nacido de invasiones. 

Sin embargo, Brisas del Sinaí es el más famoso por ser catalogado como el más pequeño de la ciudad.

Image
Magaly Rubio
Magaly Rubio
Sábado, 30 de Septiembre de 2017
Premium-home
Patrocinado por:
Logo Empresas
Temas del Día