Las extorsiones y amenazas que reciben los maestros de la región del Catatumbo es una preocupación latente en el gremio, especialmente por los casos ocurridos en el municipio de Convención, donde a la fecha se manejan unas 17 agresiones a educadores, según el Asociación Sindical de Institutores Nortesantandereanos (Asinort).
El pasado 19 de julio y con base en el decreto 1075 del 2015, el gremio de maestros junto a la Secretaría Departamental de Educación, la Policía Nacional y el Ejército, participó en una sesión ordinaria del Comité Departamental de Amenazados.
En ese encuentro se evaluaron once casos de profesores que han expuesto ante la Secretaría de Educación de Norte de Santander sus situaciones por hechos de extorsión o secuestros. “Es una situación que se vive en varios municipios, pero en Convención creemos que se trata de una banda que se está aprovechando de los docentes que tienen un salario fijo”, dijo el secretario de Educación de la región, Diomar Velásquez.
Explicó que en el comité se estableció la ruta de atención a once casos específicos, seis hechos reportados individualmente y uno grupal que involucra de manera colectiva a maestros ubicados en distintos colegios de Convención.
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Velasquez indicó que en este encuentro tomaron la decisión de organizar un foro regional extraordinario, donde serán convocados los sindicatos, la Policía, el Ejército y los alcaldes de la Provincia de Ocaña, para visibilizar la situación y riesgo de los maestros, con miras a tomar acciones que permitan minimizar estos hechos.
“Pensamos convocar no solo a los sindicatos de maestros, sino también a las Juntas de Acción Comunal, personeros, empresarios, a los organismos no gubernamentales y a la Defensoría del Pueblo. Lo que pretendemos es generar un espacio para ambientar una ruta que permita prevenir estas situaciones y alertar a las autoridades competentes para que le dé celeridad a las investigaciones que ya tienen en marcha”, agregó Diomar Velásquez.
¿Qué dice Asinort?
Hugo Cárdenas, fiscal de Asinort, expresó que es latente el riesgo que corren los educadores en el Catatumbo. El sindicato ha participado de manera activa en los comités departamentales y durante el más reciente se comprometieron a trabajar en la jornada de concientización y rechazo de estos hechos de violencia. “Se ha generado un ambiente de zozobra permanente y lo que hemos dicho es que no hay Estado realmente”, comentó.
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Para Cárdenas, las extorsiones a los maestros que se han convertido en blanco de la delincuencia en la región obedece a que por tratarse de empleados públicos que devengan un salario fijo, los grupos armados o la delincuencia que opera en esos municipios, los consideran un objetivo. “Consideran que quitarles a los docentes es rentable por el salario que reciben”, reseñó el fiscal de Asinort.
Tres docentes han sido secuestrados durante el año en curso en la región del Catatumbo. El hecho más reciente fue el de educadora Astrid Fabiola Ortega, secuestrada por actores armados frente a sus estudiantes en el centro Educativo Rural de Llano Grande, ubicado en zona rural del municipio de Convención, el pasado 14 de junio.
Aunque la maestra fue liberada dos días más tarde, el hecho generó reacciones de rechazo por parte del gremio de educadores en el Departamento.
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