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Hace falta iluminación en el centro de Cúcuta

Los habitantes denuncian que en las noches, este sector de la ciudad es peligroso.

Aunque de día el Centro Comercial a Cielo Abierto suele ser un sitio vigilado, por tratarse de una de las zonas comerciales donde más se concentra la comunidad, de noche la gente atraviesa el sector con miedo.

La razón es la falta de iluminación desde hace varios días, por el daño de las luminarias, pese a que el municipio paga 290 millones de pesos mensuales para su mantenimiento. 

Según Álvaro Gutiérrez, residente en el centro, todas las noches sale a caminar con dos perros pitbull, como defensa, pues habitantes de la calle están aprovechando la oscuridad para esconderse en cualquier esquina y consumir droga. 

“Una noche iba caminando por la avenida cuarta, y frente al banco Caja Social había dos hombres afilando cuchillos y consumiendo droga. Da miedo entrar a retirar plata de ese cajero en las noches”, indicó. 

En el parque Santander, en los alrededores del parque Mercedes y en el parque Lineal, tampoco hay iluminación. En el Centro Comercial Abierto hay 1.400 luminarias, pero muchas no funcionan. 

Sistema tiene problemas 

Según Sergio Mora, gerente de la empresa Alumbrado Público, su empresa tiene serios problemas con sitios puntuales de la ciudad como el Centro Comercial a Cielo Abierto.

Mora dijo que allí las luminarias presentan problemas técnicos que no se corrigieron, aunque Alumbrado Público advirtió que debían corregirse.

Son circuitos que tienen compartidas las redes con el sonido y los avisos luminosos. De manera que si hay una mala maniobra con el sonido, inmediatamente colapsa la red.

El gerente dijo que sobre las avenidas 1,2 y 3 del centro, así como las demás calles que se ven oscuras, funciona el alumbrado, pero el problema es que los árboles tapan los reflectores. 

Otro problema que ha tenido la empresa de alumbrado es el vandalismo y el robo. 

En el parque Lineal -por ejemplo- el gerente dijo que los habitantes de la calle se están orinando en el sistema, que es subterráneo. Además se roban el cable, lo que es un riesgo para la vida. 

“Esta semana vamos a estar interviniendo el sistema de noche porque en el día debemos casi que tirar farola por farola en el andén”, señaló.

*Redacción La Opinión

Martes, 3 de Noviembre de 2015
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