Prados del Este y San Luis son los barrios de la comuna 4 de Cúcuta que durante este jueves y el viernes serán intervenidos por la administración municipal y la Secretaría de Salud, con el objetivo de realizar un cerco epidemiológico, para verificar y sensibilizar a los habitantes sobre el cumplimiento de los protocolos de bioseguridad.
De acuerdo con el Decreto 0219 del 18 de agosto de 2020, está restringida la libre circulación de vehículos y personas por estos dos barrios, la cuál empezó a regir desde las 00:00 horas de este jueves e irá hasta las 00:00 horas del sábado 22 de agosto de 2020.
“Vamos a tener una cuarentena por la vida en los barrios San Luis y Prados del Este, que son los más afectados de la comuna 4 en casos activos y fallecidos por COVID-19. Vamos a revisar protocolos de bioseguridad en supermercados y demás establecimientos que pueden abrir de acuerdo con la norma”, dijo David Fajardo, secretario (e) de Salud de Cúcuta.
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El funcionario explicó que se realizará la búsqueda activa de posibles casos sospechosos de COVID-19, así como también, jornadas de educación y prevención en las medidas de bioseguridad.
“Con esto lo que se busca es cortar líneas de contagios de pacientes o personas no captadas, ya sean asintomáticas o con síntomas leves de COVID-19 y que no se encuentren captadas para tomas de muestra y por ende no estén aislados”, añadió Fajardo.
El alcalde de Cúcuta, Jairo Yáñez, aseguró que las medidas que se han venido tomando en otros sectores, sí han demostrado su efectividad.
“Hemos disminuido la presión en la hospitalización y en las UCI de nuestra infraestructura hospitalaria de cuidados intensivos”, mencionó el mandatario.
Yáñez señaló que, a pesar de las cifras positivas que ya se empezaron a registrar, aún no se ha librado toda la batalla, por lo que invitó a la ciudadanía a no bajar la guardia y a cumplir con las medidas sanitarias que se determinen tanto a nivel nacional, como departamental y local.
“Desobediencia y falta de cultura”
Sebastián Domínguez, edil de la comuna 4, manifestó que en la mayoría de los barrios del sector prevalece la desobediencia y la falta de cultura ciudadana, ya que, en los parques y calles principales, a diario se generan aglomeraciones.
Aunque las autoridades hacen presencia, la comunidad denuncia que muchas veces estas no hacen cumplir los decretos.
“Hasta el momento es que se va a hacer la intervención, y esa ya la habíamos solicitado desde hace dos o tres meses. Ya tenemos más de seiscientos casos y eso es preocupante. Lo que esperamos es que con estas medidas se mitigue el contagio de COVID-19 en toda la comuna”, afirmó Domínguez.
El líder comunal se refirió al incumplimiento de las medidas sanitarias por parte de la comunidad, asegurando que los fines de semana es cuando mayormente se reúnen a hacer fiestas, sin ser conscientes del peligro en el que están.
A favor y en contra
José Luis Parada, presidente de Junta de Acción Comunal (JAC) del barrio San Luis, manifestó que, aunque estas son medias útiles para ayudar a frenar la propagación del coronavirus, la administración municipal no ha pensado en las necesidades de los habitantes.
“Cómo nos van a cerrar y no dan ayudas alimentarias. Llevamos toda la emergencia sanitaria sin recibir ni un pan. Nos prometieron ayudas, solicité 180 ayudas para hogares vulnerables y nunca llegaron”, sostuvo el líder barrial.
Juan Carlos Obregón, presidente de JAC del barrio Prados del Este, afirmó que con respecto a las medidas de la Alcaldía de Cúcuta si está totalmente de acuerdo, porque la comunidad necesita tomar consciencia sobre la crítica situación que se está presentando en su barrio.
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“Me parece bien porque nosotros ya estamos saliendo de los parámetros con la cantidad de personas que están infectadas en nuestra comunidad, pero desafortunadamente la gente hace caso omiso. Sabemos que la alcaldía quiere hacer algo en ayuda de la comunidad, pero la gente no ayuda”, dijo Obregón.
La pandemia de la inseguridad
Los líderes barriales de la comuna 4 enfatizaron que han tenido que lidiar con otra pandemia, que parece no tener fin: la inseguridad.
“Se están robando los contadores y los medidores de agua. Es un problema para todos los afectados, porque a pesar de que los roban deben pagar nuevamente los medidores y en medio de la crisis no tienen para pagar”, dijo el edil de la comuna 4 Sebastián Domínguez.
Aseguró que los ladrones aprovechan las horas de la madrugada para cometer los robos, y si bien es cierto que la Policía Nacional realiza patrullajes por la zona, esta no tiene la capacidad para cubrir todo lo que pasa en la comuna.
“Nosotros pedimos un micro cuadrante, porque era para que una patrulla estuviera en continúo movimiento por el barrio. Fuimos el 10 de julio y esta es la hora y nunca se vio. Uno llama a la policía y toca esperar porque están ocupados en otros lugares”, mencionó el líder comunal del barrio San Luis.
La comunidad hace el llamado a la Policía Nacional para que fortalezcan los operativos y amplíen la capacidad de cuadrantes, pues consideran que los que están establecidos no son suficientes para los problemas y denuncias que a diario interponen.
