Las autoridades locales han rescatado de las calles en lo que va de mes a 20 menores, entre ellos seis venezolanos.
El plan que se puso en marcha a comienzos de junio para rescatar a los niños que duermen en la calle y a los que sus papás obligan a trabajar en las noches, empezó a dar los resultados esperados.
A la fecha, el resultado de los planes liderados por la Policía de Infancia y Adolescencia y defensores de familia del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) arroja 20 menores de edad que estaban dedicados a la venta de productos comestibles en los semáforos y parques de la ciudad, entre ellos seis venezolanos.
Los últimos rescates fueron de tres niños venezolanos, provenientes de Rubio (Táchira), de entre 8 y 14 años, quienes fueron hallados durmiendo en andenes de los alrededores del centro comercial Ventura Plaza.
El subintendente de la Policía de Infancia y Adolescencia Alfonso Burgos Ardila dijo que en compañía del defensor de familia del ICBF Luis Ricardo condujeron a los menores a la sede del instituto y posteriormente los llevaron al hogar de emergencia Crecer en Familia, donde recibieron alimentos y ropa.
“Allí permanecerán hasta que aparezcan sus papás venezolanos”, dijo Ardila.
Los pequeños le relataron a la Policía que llegaron a Cúcuta el pasado jueves en plan de vender verdura que habían traído de Rubio, para ayudar a sus papás.
Con el dinero que obtuvieron compraron galletas, pero como no alcanzaron a venderlas todas en los semáforos, decidieron quedarse a dormir en los andenes de Cúcuta, y ahí los encontramos y los pusimos en manos del ICBF para que vuelvan al seno de sus familias, dijo Ardila.