Agaves, atenuadas, veraneras, palma yuca y levostonia son algunas de plantas sembradas en la glorieta Los Vientos, del intercambiador de Atalaya. La recuperación y el embellecimiento del espacio se hicieron a través de la Gobernación de Norte de Santander, Alcaldía de Cúcuta y Corponor.
El deterioro de las áreas verdes por la falta de mantenimiento se vio a los meses de la inauguración del puente, donde también convirtieron en sitio para arrojar basura.
Gregorio Angarita, director de Corponor, explicó que Los Vientos y en la redoma de Claret se diseñó un paisajismo urbano desértico, que permite una sostenibilidad y mantenimiento a bajo costo, pues son especies que tienen gran resistencia a las altas temperaturas características de la ciudad.
En las dos redomas se colocaron figuras de animales hechos en caucho reciclado por el nortesantandereano, Martín Antonio Gómez. Sin embargo, el toche y la rana que estaban en el parque los ingenieros y en la conectante hacia la diagonal Santander fueron retirados.
En la glorieta de Claret el pasto estaba seco y sin riego. Entre ambas redomas suman 289 mil metros cuadrados recuperados.