En la Procuraduría Regional de Norte de Santander se cumplió una reunión con la Defensoría Regional y personerías municipales, para analizar a fondo la crisis de la salud que atraviesa Norte de Santander.

A la jornada asistieron representantes de seis Entidades Prestadoras de Salud (EPS).

La falta de convenios con la red pública, las quejas por la atención y la cartera morosa de 200 mil millones de pesos que tiene en jaque el servicio del Hospital Erasmo Meoz, fueron algunos de los temas de discusión.

Allí mismo se establecieron compromisos para actuar frente a la problemática, donde cada EPS entregará datos actualizados  sobre la ejecución y suscripción de contratos con la red prestadora.

También establecerán un enlace con los personeros, para la atención de los usuarios.

De igual manera, el Instituto Departamental de Salud (IDS) enviará un comunicado a todas las entidades encargadas para garantizar la prestación de un servicio integral a la población pobre no afiliada y no solo de urgencias, como se hace actualmente.

Finalmente, se indicó la necesidad de intervención de la Superintendencia Nacional de Salud para el tema sancionatorio en el departamento, ya que es la única entidad con esa facultad.

Con el propósito de generar presión, ya está listo un oficio dirigido a esta entidad, ya que ha sido señalada con “falta de interés” en el tema a nivel regional.

Todos los datos recopilados durante la reunión serán remitidos a la Procuraduría General de la Nación, para generar una función preventiva y de esta forma evitar que la afectación a este derecho fundamental siga creciendo y se convierta en una estadística más a nivel país.