En las calles, la gente coincide en afirmar que son menos los pimpineros que se ven, tal vez porque las autoridades aumentaron los controles para contrarrestar la venta ilegal de combustible o porque la frontera se mantiene cerrada.
Sin embargo, ya un gran número de vendedores informales de gasolina han aceptado la propuesta del Gobierno Nacional y han optado por iniciar el proceso de reconversión socio laboral.
Ayer, 25 pimpineros, socializaron su idea de negocio, con la que quieren dejar de lado la venta de gasolina. Se trata de la creación de una Cooperativa llamada Rapi Carga Express, que ofrecerá los servicios de domiciliarios y transporte de carga. Esta propuesta será presentada los próximos días para que inicie su proceso de ejecución, tras ser viabilizada. Esta idea está apoyada por la Universidad Simón Bolívar y la Alcaldía.
Esta propuesta se une a la ya presentada por otros 100 vendedores de gasolina ilegal, en la que plantean negocios amigables con el medio ambiente. El proyecto, que ya pasó la primera fase en Innpulsa Colombia consiste en la creación de una microempresa recolectora de aceites biodegradables.
Y es que luego de constantes reclamos por parte de los pimpineros para que les diera una oportunidad de empleo, el gobierno decidió destinar 2.530 millones de pesos para impulsar los nuevos modelos de negocio de los pimpineros a través del Fondo Innpulsa.
La primera convocatoria ya se hizo y próximamente se lanzará la segunda. Sin embargo, esta propuesta solo beneficiará a 515 vendedores de gasolina inicialmente, de los tres mil que actualmente hay en el departamento.
La iniciativa del Gobierno es que mediante Innpulsa se le otorgue un incentivo de 4 millones 500 mil a los pimpineros que presenten su idea de negocio solos.
Quienes se asocien recibirán una ayuda de 8 millones 500 mil pesos cada uno para conformar su empresa.
Estos proyectos tendrán como vigencia de un año y tendrán un año de acompañamiento del Ministerio de Comercio, con el fin de evitar fraudes y garantizar que el vendedor ilegal de combustible cambie su fuente de ingresos con un trabajo formal.
Para evitar que los pimpineros regresen a la informalidad cuando abran la frontera, los beneficiados con estos recursos tendrán que firmar un compromiso.
Harold Ramírez, asesor de la Alcaldía, dijo los pimpineros sí están comprometidos en salir de las calles y dejar la ilegalidad.
La Alcaldía les está haciendo un acompañamiento para instruirlos si es viable o no la idea que van a presentar.
Reconversión sociolaboral
Esta es una estrategia social-institucional, enfocada a la atención de la población vulnerable vinculada al comercio ilícito de combustible en los departamentos de zona de frontera liderada por el Ministerio de Minas y Energía en alianza con gobernaciones, alcaldías, el Sena, Ecopetrol y organizaciones de carácter público. Fundescat opera el programa en el país.
El objetivo del programa está dirigido a brindar alternativas que contribuyan al cambio de actividad ocupacional mediante la formación de nuevos conocimientos, competencias, destrezas, habilidades y de nuevas formas de generar ingresos, incluyendo la atención de aspectos sociales como parte esencial para propiciar un cambio de forma de vida de quienes ejercen un oficio riesgoso e ilegal.
En Norte de Santander, este programa se viene trabajando desde el 2012. Sin embargo, es ahora cuando los vendedores de gasolina informal se han visto más interesados en participar del programa.
La Opinión
