Desesperados. Así están los habitantes de El Salado, Panamericano, La Ínsula, San Gerardo, García Herreros y Las Cumbres, pues cada vez que tienen que movilizarse por la vía Panamericana, sienten que ponen su vida en riesgo.

Y es que los talleres y locales comerciales del sector se han adueñado de los andenes, y hasta de parte de la calle. 

Ahora las personas tienen que caminar por entre los carros.

“Esto es una hazaña”, describe con impotencia Cecilia Carrascal, habitante del sector. 

“Casi obligados, tenemos que pasar por entre los carros, ya sea por los que van por la calle o por los que están parqueados sobre el andén”, asegura.

Indiferencia de policías 

La comunidad también denuncia la indiferencia de los policías del CAI que está en la redoma del aeropuerto, justo donde comienza la avenida que se ha convertido en el sector donde más se concentra el desorden por el parqueo indiscriminado de buses y camiones en el espacio público.

Los vecinos reclaman más atención por parte de la Alcaldía, para contrarrestar esta situación que los afecta a todos.

“No queremos que saquen a quienes trabajan acá, sino que 

entiendan que los andenes no son suyos, que deben respetar”, agregó Carrascal. 

En el sector hay al menos unos de 60 talleres de mecánica, almacenes de ventas de repuestos, hoteles, montallantas, restaurantes y cafeterías.

Óscar Gerardino, secretario de Gobierno municipal, dijo que ya tienen conocimiento de esta situación y que trabajan en la ejecución de controles para contrarrestar la situación.

También llevarán al sector jornadas educativas para hacerle entender a los dueños y trabajadores de los talleres, que no pueden violar el espacio público.

“Ya estamos trabajando. Iniciamos, con los talleres y ventas de motos, ubicados en la zona del centro y nos extenderemos por toda la ciudad. La prioridad de esta administración es velar por el bienestar de todos”, sostuvo el funcionario.

Vivir en riesgo constante

Pero mientras se toman las acciones, la comunidad seguirá poniendo su vida en riesgo. 

“Necesitamos que las cosas no se queden solo en un anuncio. De eso ya estamos cansado”, sostuvo Carrascal.

“Queremos es ver acciones. Si se respeta el espacio publico nos beneficiamos todos”, concluyó.

Esta vía no tiene más de dos años de estar funcionando. El Gobierno nacional y la Alcaldía inviertieron más de 15 mil millones de pesos en la vía.

La Opinión