La maestra de primer grado Isabel Galvis trastea todos los días con el televisor de 26 pulgadas, donde le muestra a los niños videos y material didáctico. Como si fuera un bolso lo lleva y trae a diario a la institución educativa Presbítero Daniel Jordán, sede Teresa Guasch, para evitar que se lo roben como ha sucedido con los últimos equipos adquiridos por el colegio.

La medida preventiva asumida por la profesora se debe a que en menos de un mes al colegio se han metido a robar seis veces. Televisores y ventiladores son los más buscados por los delincuentes que aprovechan que en la madrugada no hay celador y se meten a robar.

Pero a los delincuentes no les basta con esto, sino que dejaron a los niños sin material didáctico para sus trabajos: tijeras, colbón, hojas, libros, plastilina, colores.

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El coordinador Enrique Sanabria explicó que tiene dos celadores, pero que estos cubren los horarios de 6 a.m. hasta las 10 p.m. Se requiere uno que labore en las horas de la madrugada.

Los techos los han destrozado, han dejado hueco en las paredes y las rejas las han destruido. “Además de robar destruyen lo que tenemos en el plantel. Se han llevado de todo las lámparas de iluminación, los flotadores de los tanques, hasta la Virgen del Carmen que estaba en el patio”, dijo Luz Marina Bros, pegadora del plantel.

La secretaria de Educación municipal, Doris Angarita, explicó que ya había enviado el personal administrativo.

La Policía Metropolitana indicó que tras los robos están tras la pista de los delincuentes. Sin embargo, la comunidad asegura que no hace mayores esfuerzos por parte de la policía, porque los montos que suman los robos son bajos.