Contrario a lo que se espera de una comunidad que quiere surgir de la mano de la educación, en Cúcuta un vecindario en vez de cuidar su única escuela, la roba.

Esta preocupante situación ocurrió el pasado viernes en el barrio Cerro Norte, ubicado en la comuna seis de la ciudad, donde según versiones, algunos vecinos desmantelaron la escuela al verla desocupada.

Directivos de la institución educativa, que pidieron no identificarse, señalaron que delincuentes se llevaron las puertas y las ventanas, también las baterías sanitarias y todo lo que tuviera valor.

Con la compañía de la Policía fueron resguardados de los ladrones algunas sillas y otros objetos de valor, que según los maestros de la institución, lograron salvarse antes de la asonada.

Karen Pinzón, residente de Cerro Norte, dijo que un maestro llegó al mediodía al colegio y sacó unos objetos y se fue dejando la puerta abierta.

“La Policía prestó guardia hasta horas de la tarde y luego se fueron. Por la noche llegaron personas y arrancaron las baterías sanitarias, las ventanas y todo lo que pudieron llevarse”, dijo Pinzón.

Por estos hechos las autoridades detuvieron a 4 personas por el delito de hurto y se recuperaron cuatro inodoros que se encuentran guardados en el CAI del barrio Guaimaral.

Directivas de la escuela indicaron que hasta el año pasado estudiaron pocos alumnos porque cada vez en este sitio hay menos niños, sin embargo, los pocos que hay ya se quedaron sin colegio porque desde que fueron amenazados los maestros el 18 de noviembre, nadie quiere volver.

Según la secretaria de Educación, Indira Pérez, la situación ya es conocida por la alcaldía y de las autoridades policiales, que se reunieron en un consejo de seguridad para discutir este y otros asuntos que conciernen con la inseguridad en los colegios.

“Parece que hay una banda criminal que amenazó a niños y a maestros. No le puedo decir cuántos colegios requieren vigilancia, pero lo que sí sabemos es que varios rectores han expuesto su problemática”, indicó.

La secretaría dijo que la Policía, Fiscalía y Ejército van a hacer mayor presencia en la zona, mientras que la alcaldía revisará que escuelas están en peores condiciones para volverlas a poner a funcionar.

*La Opinión