Hace algunas décadas, el bello sol que baña las montañas de la Perla del Norte vio brillar los rieles de uno de los más importantes ferrocarriles del país, que trajo progreso y emprendimiento a la frontera.
Por esta razón, la Sociedad Colombiana de Arquitectos (SCA) ha nominado para la XXVII Bienal Colombiana de Arquitectura y Urbanismo el trabajo “Ferrocarril de Cúcuta: Patrimonio Ferroviario de Norte de Santander” cuyo autor es Corpatrimonio y liderado por los arquitectos María Teresa Vela Vicini, Luis Ernesto Rodríguez y la historiadora María Yolanda Suárez.
La investigación fue uno de los 13 proyectos seleccionados para participar en la categoría Investigación y crítica. En total, 118 trabajos se inscribieron en nueve categorías.
La Bienal, que se desarrolla anualmente en el Centro de Convenciones de Cartagena, se traslada totalmente a la virtualidad del 18 al 28 de noviembre, aspecto que permitirá un mayor flujo de participantes en las discusiones, conversaciones y exposiciones del evento.
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“Con el apoyo y la participación de estudiantes y profesionales, afianzamos los propósitos de esta nueva Bienal, y continuaremos edificando juntos el legado social y cultural de nuestra arquitectura”, expresó el arquitecto Alfredo Reyes Rojas, presidente nacional de la Sociedad Colombiana de Arquitectos.
Patrimonio Ferrovario
El Ferrocarril de Cúcuta, originario del siglo XIX, se considera una obra vial de última tecnología para la época, sistema bimodal de carga y pasajeros con conexión a través de los ríos Zulia y Catatumbo hacia el Puerto de Maracaibo, con salida al mundo por el mar Caribe.
La línea férrea de esta empresa era considerada internacional, dado que conectaba a la ciudad, así como a los municipios de Villa del Rosario, Pamplona, El Diamante, Puerto Villamizar y Puerto Santander con los venezolanos de Orope, San Juan de Las Palmas, El Vigía y San Carlos.
Con el pasar del tiempo, la apertura de vías para vehículos y el bajo costo de la gasolina, hicieron que el ferrocarril tuviera su declive, reduciéndose a rieles oxidados y escombros.
En la actualidad, las estaciones se han derrumbado y otras permanecen en abandono. La locomotora principal que se encargaba de hacer los viajes no funciona, pero se le rinde un homenaje con un monumento que se encuentra ubicado en frente del Terminal de Transporte.
