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‘Las juventudes hacen parte del cambio’
En Cúcuta, el colectivo Joenpaz promueve la paz mediante labor social de jóvenes.
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Domingo, 6 de Diciembre de 2020

Desde su niñez, Clara Valencia se inclinó por el trabajo comunitario. En el colegio representaba a sus compañeros e hizo parte de una iniciativa ambiental que marcó su vida. A partir de allí, inició su trabajo con las comunidades, el mismo que tiempo después se fue fortaleciendo gracias a las enseñanzas de su carrera universitaria como Trabajadora Social en la Universidad Francisco de Paula Santander.

De esta forma  varios jóvenes, quienes tienen los mismos intereses de trabajar en pro del cambio social, se unieron y crearon el colectivo Joenpaz, esta vez con un enfoque de paz promovido desde la juventud.

Esta mujer de 27 años, ha estado vinculada a diferentes organizaciones como la Fundación 5ta con 5ta, donde coordinó el proyecto ‘Catatumbo hereda paz’, que tenía como objetivo potenciar por medio del arte la participación e incidencia juvenil. 

“Este proyecto me permitió encontrarme con algunas situaciones que yo he vivido. Soy mujer rural y era complicado el tema del estudio.Allí en el Catatumbo viven esa misma realidad, me vi reflejada en ellos, de alguna manera siempre los tengo presente en mi discurso, ellos necesitan oportunidades”, afirmó Valencia con una mirada esperanzadora.

Otro proyecto en el que estuvo como coordinadora técnica desde diciembre de 2019 hasta abril de este año, fue el denominado ‘Mi ciudad frontera’ también con la Fundación 5ta con 5ta en convenio con el Programa de Gobernabilidad Regional de USAID para fortalecer la incidencia y participación de los jóvenes en la frontera, donde se contruyó una agenda con  muchachos migrantes, retornados y del área metropolitana.

Según Valencia, en la actualidad se estigmatiza el trabajo de los jóvenes,  ya que algunas personas mayores los consideran inexpertos.Sin embargo, pertenecer a la corporación le da otro significado mucho más prometedor a la labor social que lideran los nuevos profesionales.

Los espacios de formación han sido fundamentales en el enfoque que ella le ha dado a su trabajo, adelantó sus prácticas de universidad con la secretaría de Víctimas Paz y Posconflicto de la gobernación, y  fue una experiencia que marcó su vida laboral y la inclinó a trabajar por la paz.

“La sociedad debe darle oportunidades a los jóvenes, y me alegra trabajar por ellos desde la institucionalidad y por medio de Joenpaz”, enfatizó.

Valencia no desconoce el hecho de que algunas personas cuestionen el trabajo de las organizaciones de jóvenes, pero desde su punto de vista, los colectivos en ocasiones alcanzan lo que la institucionalidad no, para ella estas organizaciones están porque hay una necesidad, y más allá de ello, la gente estigmatiza la organización social, algunos piensan que están asociados para otros fines. 

El principal problema, señala Valencia, es que no se reconoce como fundamental las apuestas comunitarias, porque, desde su concepto, si se conociera, se generaría una articulación y una alianza como se hace desde la gestión pública local, conectando a todos los sectores sociales para generar planes en conjunto, ampliando el impacto que tienen las organizaciones.

Actualmente, Valencia hace parte del equipo social del centro de pensamiento urbano del Área Metropolitana de Cúcuta.

(Desde el colectivo Joenpaz coordina una investigación sobre la violencia basada en género. | Foto: cortesía.)

Aprendizajes y habilidades, al servicio de la comunidad

“Cuando inició la pandemia ,con Joenpaz estábamos desarrollando junto a  USAID,  un proyecto llamado “Borrar la raya”, socializando a los  niños en los colegios una cartilla instructiva en donde a través de los juegos y la didáctica, los estudiantes colombianos, venezolanos y retornados convivieran positivamente en los espacios de aprendizaje. Pero debido a la pandemia, el proyecto se trasladó a la virtualidad e integró docentes, lo que nos ayuda a tener un mayor alcance”, recuerda.

De igual forma, Valencia resaltá que con la OIM se ha apoyado en la entrega de ayuda humanitaria inmediata en Los Patios, además con las mujeres, se han entregado kits de copas menstruales, todo esto a través del colectivo, que lleva un proceso con la población que se beneficia de estas ayudas. 

“No puedes solo llegar y entregar ayudas a las comunidades, primero se le debe informar y tumbar todos esos mitos que pueden tener sobre ello”.

Por otro parte, en el año 2018 estuvo vinculada desde el área cultural como monitora educativa en el Museo Casa Natal del General Francisco de Paula Santander, encargada de organizar los encuentros y recorridos a quienes llegaban a visitar el emblemático lugar, narrando la historia del general Francisco de Paula Santander, y su cuna en Villa del Rosario, a los visitantes curiosos.

Adicionalmente, Clara Valencia hace parte de la fundación Moiras, dónde junto con otras mujeres se dedica a llevar un mensaje de paz a través del arte textil.

Pertenecer a estos colectivos le ha permitido ver el desarrollo de las comunidades y se siente orgullosa al saber que las organizaciones a las que pertenece, han sido parte de ese cambio.

Valencia considera que un líder es aquel que tiene coherencia del discurso con las acciones, no solo por lo que dice o por ser visible a través de una pantalla, lo importante es generar acciones de cambio, en el contexto del país y la situación que viven los líderes sociales.

“Me preocupa que se estén apagando las voces de las comunidades. Los asesinatos de los líderes son mensajes negativos que llegan a quienes continúan trabajando día a día. Estas experiencias me hacen tener un criterio y una posición clara como ciudadana, poder tomar decisiones si no estoy de acuerdo con algo. Me gusta que he llegado a los espacios laborales sin politiquería, de forma personal me permito decirles a otros que es posible construir y posible aportar a la sociedad”, puntualizó.

Valencia además ha trabajado coordinando el proceso de redes de sororidad, donde a través de la expresión artística se abordaban temas de violencias basadas en género, y diálogos de apoyo mediante espacios de tejido, el teatro, las artes visuales y la  técnica vocal.

En sus proyectos, se encuentra liderando una investigación de la fundacion Joenpaz en Alianza por la Solidaridad, sobre violencias basadas en género que sufren las mujeres migrantes, retornadas y de la población local. El proyecto integra seis municipios: Cúcuta, Villa del Rosario, Puerto Santander, Tibú, Ragonvalia y Herrán. 

“La importancia de estas investigaciones radica en que no se cuente con los datos precisos sobre diversas situaciones de riesgo para las mujeres y de que muchas no conocen las líneas de respuesta institucional y su funcionamiento.”

Karen Gallego | Practicante de periodismo 

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