Los jugadores de la Premier League no serán sancionados si se expresan de manera pacífica contra el racismo cuando se reinicie el campeonato, declaró la instancia en un comunicado ayer.

 

La precisión de la Federación Inglesa (FA) llega tras la conmoción por la muerte de George Floyd, el ciudadano negro estadounidense muerto hace una semana en Mineápolis a manos de la policía durante su detención, unos hechos que han dado paso a una oleada de protestas y disturbios en todo el mundo.

 

Deportistas de varias disciplinas, entre ellas varios jugadores de la Bundesliga alemana, han protestado en los últimos días por la muerte de Floyd y para apoyar el movimientos ‘Black Lives Matter’ (‘La vida de los negros importa’).

 

En un comunicado publicado ayer, la FA aseguró que aplicará el “sentido común” a la hora de abordar los gestos, mensajes y comunicados que puedan emitir los futbolistas o técnicos sobre este tema cuando regrese la Premier League el 17 de junio.

 

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De este mensaje se entiende que si algún futbolista, como hizo el domingo el delantero francés del Borussia Mönchengladbach Marcus Thuram, celebra un gol con una rodilla en tierra y la cabeza gacha (uno de los símbolos contra la represión policial hacia la comunidad negra), no será sancionado.

 

“La FA condena con firmeza cualquier tipo de discriminación y se ha esforzado por garantizar en los últimos años que el fútbol en Inglaterra sea diverso e inclusivo”, recordó la entidad en su comunicado.

 

“Cuando haya comportamientos o gestos en la cancha que puedan constituir una violación de las reglas del juego, se revisarán caso por caso, aplicando el sentido común y entendiendo el contexto”, declaró la FA.

 

Siguiendo el ejemplo del Liverpool el lunes, los jugadores del Chelsea y del Newcastle mostraron su homenaje a George Floyd arrodillándose sobre el césped antes de la sesión de entrenamiento.

 

El defensa del Newcastle DeAndre Yedlin, internacional por Estados Unidos, tuiteó varios mensajes para explicar la situación: “Un par de días después de la muerte de George Floyd, mi abuelo me escribió para decirme que está feliz porque yo no viva en Estados Unidos ahora porque temería por mi vida como joven hombre negro”.

 

“Cada estadounidense necesita preguntarse a sí mismo si existe ‘libertad y justicia para todos’ y si la respuesta es sí, entonces forman parte del problema”, añadió.