Hoy comienza el Giro de Italia, la primera gran carrera de ciclismo mundial en la temporada además del Tour de Francia y la Vuelta a España, aumenta la expectativa e ilusión de volver a ver a un corredor nacional vestido de rosa, color de la prenda con la que se distingue al líder de la competencia, y, de paso, que su nombre quede grabado en el prestigioso trofeo, en forma de espiral, donde se resaltan todos los ganadores de la carrera.

En 101 años de historia del certamen solo un pedalista del país, el boyacense Nairo Quintana, en 2014, ha logrado semejante privilegio. Para la venidera edición siete representantes desafiarán, hasta el 2 de junio, los 3.518,5 kilómetros distribuidos en 21 etapas.

Se trata de Miguel Ángel López (Astana), Iván Sosa, Sebastián Henao (Ineos), Esteban Chaves (Mitchelton), Miguel Flórez (Androni), Fernando Gaviria y Sebastián Molano (UAE).

Entre ellos, el primero es señalado como fuerte candidato al podio final. Pero, ¿por qué a López, de 25 años, la misma organización del Giro lo ubica en el cartel de favoritos?

¿Tiene el potencial y la jerarquía para darle batalla a ilustres como el holandés Tom Dumoulin, quien venció en 2017 y fue segundo en 2018; el local Vincenzo Nibali, vencedor en 2013 y 2016; y el esloveno Primoz Roglic, entre otros?

Expertos de esta disciplina, como Rafael Acevedo –exciclista y técnico– y Luis Felipe Laverde –pedalista–, se atreven a afirmar que, pese a su edad, la experiencia y aprendizaje adquiridas en poco tiempo, sumado a sus destacados resultados, sitúan a López como fuerte aspirante al triunfo.

Si bien hubo impotencia por la lesión de clavícula que sufrió durante un entrenamiento el cundinamarqués Egan Bernal (Team Ineos) y que lo privó de estar en la prueba en la que, a la vez, estaba en el sonajero para luchar por la victoria final, el optimismo por lo que puedan hacer Miguel Ángel y compañía se mantiene firme.

Un recorrido que le conviene

Para ganar una carrera de tres semanas como el Giro, un corredor debe tener condiciones para afrontar la contrarreloj y los distintos trayectos por los que transita: llano, descensos y ascensos.

En sí, el terreno montañoso de la venidera prueba les cae de perlas a los colombianos, quienes en esta especialidad son bastantes fuertes. En cinco fracciones de alta montaña y en 7 finales en alto, tendrían la oportunidad de sacar buenas diferencias frente a sus oponentes.

“Quienes han corrido el Giro son los que tienen mayor opción de pelearlo debido a la experiencia acumulada. Además de López hay que tener en cuenta a Chaves (2 en 2016). Es una competencia que siempre será dura debido a su alta dosis de montaña, sobre todo en la última semana”, asegura Laverde, corredor del equipo local Coldeportes-Zenú, quien disputó siete rondas italianas.

“Aunque se siente el ambiente de optimismo, al día de hoy veo como gran oponente de los colombianos a Nibali”, agrega.

Las contrarreloj no son tan planas

Quizás una de las falencias de los embajadores nuestros a través de la historia, con excepción de los exruteros Santiago Botero –campeón mundial en dicha modalidad en Bélgica-2002– y Víctor Hugo Peña –ganó la etapa 11 del Giro 2000, 42 km entre Lignano y Bibione–, ha sido el desempeño en las fracciones contra el reloj. En ellas han cedido buen tiempo y, por ende, la oportunidad de lograr más títulos, como le sucedió al propio Quintana, que ha sido dos veces subcampeón y otra tercero en el Tour de Francia, alejado, generalmente, por tiempo perdido en estas etapas.

Sin embargo, las tres jornadas en el esfuerzo individual que hay en el Giro-2019 no son tan planas, y López ha sabido defenderse en esta modalidad.

La carrera italiana se abre con una crono de 8.2 kilómetros en Bolonia y terminará en subida, en el Santuario de Nuestra Señora de San Luca. La jornada 9, con trayecto de 34.7 km desde Riccione, termina ascendiendo a San Marino; mientras que la última fracción, la 21, finaliza en Verona luego de 15.6 km, pero con trepada desde el km 9.1 hacia Torricelle.

“En los últimos años no se había dado un recorrido que se acomodara tanto a las condiciones de nuestros ciclistas. La topografía de ese país nos conviene, y aún más esta vez que las crono no son tan llanas. Esa modalidad ha sido el talón de Aquiles de los colombianos, pienso que ahora vamos a estar más equilibrados en ese sentido ante los europeos”, asegura el técnico Rafael Acevedo, quien de ciclista terminó 42 en el Giro de 1985.

Rendimiento en el presente año

En lo que va corrido de temporada, Miguel Ángel fue campeón del Tour Colombia y de la Vuelta a Cataluña. En la primera cita, que se disputó en Antioquia, se midió ante grandes referentes como el inglés Chris Froome (Team Ineos) o el francés Julian Alaphilippe (Deceuninck), este último con 9 victorias en la temporada.

Llegó al ciclismo de Europa en 2015 y competirá en su quinta gran ronda, luego de ser tercero en el Giro de Italia y la Vuelta a España en 2018.

“Este muchacho –‘Supermán’ López– me hace recordar los años 2013 y 2014 cuando Nairo, antecedido de buenos resultados, llegó al Tour de Francia, en los que también causó sensación. Es joven, pero con un deseo desenfrenado de hacer la diferencia. Si bien la tendrá complicada ante ilustres como Nibali, Dumoulin o Simon Yates, ya los ha enfrentado y demuestra que puede estar a la altura de ellos. Su buen andar esta campaña llena de ilusión”, manifiesta Raúl Mesa, entrenador de Colombia, quien añade que Iván Sosa, quien remplazó a Bernal en el Ineos para el Giro, también puede dar sorpresas.

Figuras desde Temprana edad

Pese al poco tiempo que llevan en la máxima categoría del pedalismo, los nuevos escaladores colombianos ya gozan de respeto, entre ellos Sosa, de 21 de edad y que logró 10 victorias en 2018 y este año fue campeón de la montaña en el Tour Colombia.

“En el equipo me han llevado con calma, y ya estamos viendo que las grandes carreras las podemos disputar bien, uno siempre trata de dejar lo mejor aunque un año no salga tan bueno”, expresa López, quien agrega que “trabaja para ser ejemplo a seguir, sobre todo para la niñez, para que siempre luche por sus sueños más allá de los baches que se puedan presentar en la vida”.

Cuenta con un equipo a su disposición

Tener el respaldo de directivos y compañeros juega a favor del deportista, así lo cree el excorredor Mauricio Ardila, único nacional que ha terminado ocho giros. “Miguel Ángel, por resultados y rendimiento, ha logrado posicionarse como verdadera cabeza de equipo. Entonces desde el primer día de la competencia tendrá el apoyo ciento por ciento de sus gregarios. Esto genera confianza, porque sabe que su equipo no llegará a ensayar sino que inicia como líder fijo y que esa capitanía no estará en discusión”.

La competencia homenajeará a Leonardo da Vinci en el aniversario 500 de su fallecimiento, así como del ciclista Fausto Coppi. Y en carrera, estos siete colombianos que llegan precedidos con pergaminos para dejar huella.