La Opinión
Suscríbete
Elecciones 2023 Elecciones 2023 mobile
Economía
ProEmpresas, bajo la gestión de Mónica Fonseca Vigolla
Trabaja en la perspectiva de crear una mentalidad innovadora y de competitividad entre quienes manejan el sector productivo.
Image
Cicerón Flórez Moya
Cicerón Flórez
Sábado, 20 de Junio de 2015

La creación de ProEmpresas ha representado para Norte Santander ponerse en el rumbo del desarrollo, con una visión renovada y dinámica de las posibilidades regionales en el sector productivo. La dirección de la entidad fue confiada a la ingeniera de sistemas Mónica Fonseca Vigolla desde 2004. Nació en Cúcuta. Además de su título profesional de pregrado conferido por la Universidad Francisco de Paula Santander, tiene una especialización en Formulación y Evaluación de Proyectos de Desarrollo Social, Administración y Docencia Universitaria y Gerencia de Empresas. Es también Experta en Soluciones Empresariales que generen visión de desarrollo para la competitividad.

En esta entrevista concedida a La Opinión explica las proyecciones de la entidad que dirige.

¿Qué es ProEmpresas?

Es la Incubadora-Aceleradora de Empresas de Norte Santander que busca contribuir al desarrollo sustentable de la región y el país mediante procesos socialmente responsables a través de las líneas ProEmpresas Community y ProEmpresas Connection. En este sentido, ofrece al ecosistema consultorías, soluciones empresariales, asistencia técnica y operación de proyectos con enfoques diferenciales. Su novedosa propuesta de valor  apoya emprendimientos de base tecnológica y es el conector natural entre la Universidad, la Empresa y el Estado.

¿Cuál ha sido la acogida de los empresarios de la región a esos objetivos?

Muy positiva. Los empresarios nos han respaldado, comenzando por nuestros socios, quienes creyeron en el propósito de renovarnos para ofrecer un nuevo modelo de incubación-aceleración al ecosistema. Hemos tenido a dos grandes aliados en uno de nuestros programas bandera: Open Innovation Cúcuta 2015, en el cual Cerámica Italia, Transformadores CDM y su filial Ingeniería 2000, han lanzado sus desafíos tecnológicos para que los semilleros de investigación de las universidades los solucionen, dinamizando el ecosistema de innovación, tecnología y emprendimiento.

¿Cree que Norte Santander podrá superar su actual nivel productivo?

Creo que sí, cuando logremos cambiar el modelo de producción del departamento. En los últimos años Norte Santander le ha aportado al PIB nacional cerca de un 1,76%, que es muy bajo. Nuestros empresarios están comprendiendo que debemos mirar otras opciones y en ese orden de ideas, creemos que el ecosistema está maduro para apostarle a nuevos procesos innovadores que garanticen a los emprendedores y empresarios ingresar al mundo de la innovación y la tecnología y generar un desarrollo económico más acelerado para salir del atraso que tenemos con respecto a otras regiones del país.

¿Cómo responden las universidades de la región a las propuestas de ProEmpresas?

Vemos con alegría que nuestro mayor capital en la sociedad, que son los jóvenes -porque son el relevo generacional-, se interesan cada día más por la innovación y la tecnología. Hay mucha gente ingeniosa y emprendedora apostándole a crear sus propios proyectos productivos. Lo hemos podido constatar en las convocatorias que hemos hecho a diferentes talleres y capacitaciones con el interés de generar una cultura de la creatividad y la innovación en el departamento, y nos hemos visto limitados en espacio ante la afluencia de estudiantes y emprendedores que han llegado a escuchar con avidez lo que está pasando en otras regiones del mundo. Hemos tenido la fortuna de contar con un partner excelente, como es la incubadora de negocios Chrysalis de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso en Chile, que nos asesora en esta nueva etapa de ProEmpresas. Estos emprendedores chilenos nos han acompañado durante un año y con ellos hemos hecho trasferencia de conocimientos a los emprendedores cucuteños y de la frontera.

¿Qué tanto ha afectado al sector productivo de esta zona fronteriza la crisis de Venezuela?

Nos afecta mucho, porque estábamos acostumbrados a vivir del comercio binacional y las condiciones económicas del país vecino cambiaron radicalmente. Podríamos decir que estamos viviendo la época de las ‘vacas flacas’, y de allí también se deriva el indicador que impacta dramáticamente a nuestras familias y profesionales, como es tener la tasa de desempleo más alta del país.

¿Hay en la región voluntad y capacidad para la innovación?

ProEmpresas ha hecho un juicioso Mapeo Tecnológico en las Universidades de la región y podemos decir que en los últimos años hemos avanzado. Estos fueron los resultados que se obtuvieron: tenemos 211 grupos de investigación de universidades e institutos tecnológicos, compuestos así: Semilleros de Investigación: 118; Grupos de Investigación: 81; Plan de Estudios: 2; Unidad Académica: 1;  y otros 9 de investigadores en general. Además, hay un gran interés desde el Comité Universidad-Empresa-Estado (CUEE) de Norte de Santander por fortalecer la relación entre estos importantes actores.

¿Qué factores negativos podrían perturbar la iniciativa privada en inversión y proyectos empresariales?

Consideramos que el Gobierno Nacional ha diseñado una serie de planes y programas que buscan apalancar con recursos financieros los esfuerzos empresariales que se dan en las regiones. Colciencias, el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo a través de Innpulsa, el Sena con el Fondo Emprender, y otros organismos de cooperación internacional permanentemente lanzan convocatorias abiertas a Colombia y el mundo. Es una forma de motivar los esfuerzos que se hacen y nos permite mantenernos atentos a lo que sucede en otras partes del mundo y a medirnos frente a nuestros competidores.

¿Es optimista con respecto al futuro de la región?

Por supuesto. Siempre he sido optimista y durante los 16 años de funcionamiento de ProEmpresas nos hemos reinventado varias veces para mantenernos vigentes. Somos de las pocas incubadoras de empresas en el país que ha logrado sobrevivir durante tanto tiempo, con recursos propios y siendo autogestionarios.

¿Qué más se puede hacer para mejorar el desarrollo regional?

Tanto el Gobierno Nacional como el sector privado deben promover la creación de fondos de financiamiento o inversionistas ángel, que ofrecen capitales de alto riesgo para  apalancar a los emprendedores en la fase inicial o intermedia de su proyecto. La internacionalización también es importante. Hoy la globalización nos permite ofrecer al mundo, por ejemplo, una aplicación de software que puede resolver similares problemáticas a las que nos vemos enfrentados localmente. Y todo a través de una plataforma de internet. Es decir, los problemas de vialidad pasaron a un segundo plano, que siempre había sido nuestra principal limitante.

¿Cómo ve la contribución oficial a los proyectos empresariales?

A nivel nacional me parece muy buena, aunque nunca alcanzarán los recursos para tantas regiones. Colombia, según una noticia de hace unos meses, es uno de los países más emprendedores del mundo. En el ámbito regional y local hace falta mayor compromiso por parte de los sectores público y privado por apoyar estos nuevos modelos de producción: ambos deben creer más en nuestros recursos humanos y potenciales emprendedores. Por mi experiencia de vida, porque tengo en ProEmpresas más de 12 años, les puedo decir que esta Corporación es mi mayor emprendimiento, que emplea a talento cucuteño, y hemos logrado posicionar una imagen de seriedad y cumplimiento en los diferentes proyectos que hemos asumido a nivel nacional e internacional.

Temas del Día